Casi cuarenta años atrás, el lago camerunés de Nyos fue el escenario de uno de los mayores desastres naturales que vivió el país. Una erupción límnica causó que una acumulación de gas escape a través de la superficie del lago, provocando una violenta explosión y terminando con la vida de miles de personas.
La historia de un lago explosivo
El 21 de agosto de 1986, el lago Nyos, en Camerún, liberó de repente una gran nube que asfixió a más de 1.700 personas e innumerables animales.
Los científicos no tardaron en descubrir por qué la gente se había desmayado y, en muchos casos, muerto. La nube en cuestión no contenía solo aire sino también dióxido de carbono (CO2). Al esparcirse por las cercanías del lago y ser respirado por las aldeas colindantes mataba a sus integrantes, apagando sus conciencias y bloqueando la respiración.
También te puede interesar: ¿Cuándo ocurrió el tornado más devastador de Sudamérica?
Pero, ¿por qué algunos murieron mientras otros simplemente quedaron inconscientes? Los investigadores notaron que el fenómeno dependió del porcentaje de CO2 ingerido.
Cuando la concentración de CO2 era del 15% o inferior, las personas perdían el conocimiento y despertaban más tarde —hasta 36 horas después en algunos casos—. Por su parte, las personas que inhalaban más del 15% de CO2 dejaban de respirar en cuestión de minutos y luego morían.
¿Por qué explotó el lago Nyos?
El lago Nyos se encuentra, desde su formación, sobre un volcán. Al momento de la tragedia este se consideraba inactivo, dado que no había entrado en erupción ni una vez en los últimos 10.000 años.
Al principio, los científicos que investigaron los causantes de su explosión asumieron que el catalizador principal había sido una erupción volcánica. Por ello buscaron pistas típicas de este fenómeno, como azufre y cloruro en el lago. También instalaron sismómetros alrededor de la masa de agua para registrar los pequeños terremotos que suelen tomar lugar tras una erupción volcánica. Pero no encontraron nada del estilo. La respuesta estaba en otro lado.
También te puede interesar: ¿Ya viste las mejores imágenes científicas del 2023?
Al continuar la investigación se dieron cuenta que el proceso había sido mucho más paulatino. Durante un largo tiempo se había estado acumulando en el fondo del lago una gran cantidad de dióxido de carbono. Al ser un lago estratificado y profundo, el agua de las capas superiores no llegaba a mezclarse con las inferiores, lo que impidió que el fondo se desgasificara.
El Lago Nyos explotó por un leve movimiento geológico que hizo que el dióxido de carbono emerja de las profundidades con una fuerza tal que no pudo ser totalmente neutralizado por el agua. Salió a la superficie violentamente en forma de nube tóxica de CO2 y, acto siguiente, procedió a inundar los valles y aldeas cercanas.
