La “Educación Autodirigida” implica que los niños y niñas tengan el control y la responsabilidad de su propio aprendizaje. No hay precisamente, al menos hasta el momento, una escuela basada en este método que pueda ofrecer una validación oficial. Sin embargo, muchos defensores de este modelo educativo afirman que el hecho de tener un título o una validación oficial no necesariamente garantiza que los estudiantes posean conocimientos útiles para la vida adulta.
¿En qué consiste la “Educación Autodirigida”?
La “Educación Autodirigida” parte de la premisa de que la educación escolar tradicional no potencia el desarrollo de la capacidad de tomar iniciativas y decisiones por cuenta propia, la resolución de problemas, la responsabilidad, la perseverancia, la resiliencia y la creatividad.
La “Educación Autodirigida” se basa en que los mismos niños y niñas elijan qué aprender y en qué momento. Este enfoque sostiene que si los estudiantes deciden qué quieren estudiar, comenzarán a tener iniciativas y a tomar decisiones propias. Además, señala que si los niños y niñas exploran el mundo que los rodea por sí mismos, podrían superar sus miedos y resolver los problemas que se les aparecen de una manera muy creativa. El objetivo de la “Educación Autodirigida” es fomentar que los estudiantes sean emprendedores e innovadores, responsables de sí mismos y capaces de crear su propia vida y lo que necesitan para autosustentarse.
Algunas críticas a la “Educación Autodirigida”
Hoy en día hay diferentes miradas en torno a cómo lograr que la “Educación Autodirigida” realmente sea una revolución educativa mundial. El enfoque no ha recibido críticas vinculadas al modelo pedagógico en sí mismo, ya que muchas personas están de acuerdo con el modo de aprendizaje de la “Educación Autodirigida”. En general la discusión de fondo respecto de este modelo tiene que ver con cuestiones político-sociales. Por ejemplo, algunos críticos de este enfoque sostienen que se trata de un modelo educativo que podría beneficiar a las clases privilegiadas, pero que dejaría afuera a las grandes mayorías de estudiantes.
Además, los críticos de la “Educación Autodirigida” sostienen que esta corriente representa una contradicción en torno al financiamiento. La propuesta de los defensores de este modelo pedagógico es que eventualmente sea financiada con fondos públicos, a través de vouchers, como una alternativa legítima al sistema educativo. Sin embargo, sus críticos aseguran que los vouchers implican una privatización de la educación.
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