José María Torres fue un pedagogo español exiliado en Argentina que se desempeñó como Rector de la Escuela Normal Paraná entre 1878 y 1885. Nació en Málaga (España) en 1823 y murió en Gualeguay (Entre Ríos) en 1895.
Los primeros pasos profesionales de José María Torres
José María Torres inició su formación profesional en España cuando, con 17 años, ingresó en la Escuela Normal Central de Madrid. Se recibió como Profesor Normal en 1864. Fue parte del primer plantel de maestros normalistas egresados de aquella escuela. En 1846 fue nombrado Visitador de Escuelas de Instrucción Primaria y miembro de la Comisión Examinadora de Maestros. Simultáneamente ejerció como Vicedirector de la Escuela de Málaga. En 1849 Torres se desempeñó como Inspector de Instrucción Primaria en la provincia de Alicante. Años más tarde fue nombrado Inspector de primera clase en Madrid.
Después de haber trabajado veinte años en el sistema educativo español tuvo que abandonar su país natal por motivos políticos y se trasladó a Uruguay. En 1864 llegó a Montevideo, donde pensaba establecerse porque le habían prometido el puesto de Director General de Escuelas. Sin embargo, la situación social de ese país lo impidió, razón por la cual se radicó en Argentina.
La labor educativa de José María Torres en Argentina
En 1864 José María Torres emprendió el viaje hacia Buenos Aires y un mes después fue nombrado Vicerrector del Colegio Nacional de Buenos Aires. En 1865 se desempeñó como Inspector de Colegios, cuya función consistía en visitar las escuelas primarias y promover la creación de Escuelas Normales en las provincias. Ese mismo año fundó en Corrientes un Departamento para la formación de Preceptores e intentó crear becas para los alumnos aspirantes mediante una gestión con la Legislatura provincial.
Por otro lado, en Entre Ríos, debido a la insistencia del gobernador Justo José de Urquiza, se organizó el Departamento de Escuelas Primarias Provinciales. Paralelamente en la ciudad entrerriana de Concepción del Uruguay se inició la construcción de un edificio para una futura Escuela Normal. Torres terminó haciéndose cargo de la dirección de la Escuela Normal de Paraná, que fue el primer establecimiento de formación profesional del Magisterio, fundado por Sarmiento. Ejerció como Rector de la Escuela Normal de Paraná en dos períodos: el primero, entre 1876 y 1883 y el segundo, desde 1892 hasta 1894.
La gestión de Torres se caracterizó por introducir una serie de modificaciones, entre las que se encuentra la prohibición de los castigos físicos al alumno. Según este pedagogo, el maestro debía “estudiar” a los estudiantes y sólo debía bastar la mirada y la palabra para disciplinarlos.
El método pedagógico de José María Torres
José María Torres diseñó un método de alfabetización que tuvo mucho éxito entre los docentes normalistas. Sucesivas generaciones de maestros enseñaron a leer y a escribir a los niños con el método de Torres, el cual predominó durante décadas en las escuelas argentinas. Dicho modelo prescribía lecciones de lectura rigurosas en las cuales predominaba la exposición oral, el uso de la interrogación y el control de la interpretación de los textos a partir de la regulación didáctica por parte del docente.
Torres denominó a su propuesta como “método ecléctico de lectura” y desarrolló instrucciones a modo de pasos adecuados para cada momento del desarrollo de los niños. El método consistía en un conjunto de quince reglas que organizaban la enseñanza de la lectura. Sus indicaciones sirvieron para diseñar una “clase modelo” que fue seguida por numerosas generaciones de maestros normales. Torres decía que el acceso a la verdad era garantizado a medida que la lectura de los diversos textos se perfeccionaba.
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