El Hipódromo de la Castellana fue inaugurado el 31 de mayo de 1878, coincidiendo con la boda del rey Alfonso XII y María de las Mercedes de Orleans. Su construcción fue impulsada por la Sociedad de Fomento de la Cría Caballar de España, que buscaba crear un espacio elegante para las competiciones ecuestres.
Ubicado en el Paseo de la Castellana, una de las avenidas más importantes de la capital española, el hipódromo ocupaba un extenso terreno de casi 30 hectáreas, rodeado de jardines y tribunas de madera que reflejaban el lujo y la distinción de la aristocracia madrileña de la época.
Su pista principal medía 1.600 metros y estaba especialmente diseñada para carreras de caballos de velocidad, aunque también se organizaron concursos hípicos y exposiciones ecuestres que convocaban a cientos de espectadores.
Cuando el fútbol llegó al Hipódromo de la Castellana

Con el paso del tiempo, y especialmente a comienzos del siglo XX, el Hipódromo de la Castellana comenzó a albergar eventos deportivos muy distintos a los que le dieron origen.
Entre 1890 y 1902, el recinto fue utilizado como escenario para los primeros partidos de fútbol organizados en Madrid.
En sus terrenos jugaron equipos pioneros como el Madrid Foot Ball Club (que luego sería el Real Madrid), el Athletic Club y el Club Español de Madrid. Incluso se celebraron partidos del Campeonato de España de Fútbol, antecedente directo de la Copa del Rey.
El césped del hipódromo, adaptado para estos nuevos encuentros, se convirtió en testigo del nacimiento del fútbol moderno en España. Allí convivieron por primera vez los caballos y los futbolistas, en un mismo recinto que simbolizaba la transición de los viejos deportes aristocráticos hacia los nuevos espectáculos de masas.
Declive, demolición y legado del Hipódromo de la Castellana
A partir de la década de 1920, el Hipódromo de la Castellana comenzó a perder protagonismo. La expansión urbana de Madrid y la creación de nuevos recintos deportivos llevaron a su demolición definitiva en 1933.
Hoy, en el lugar donde se levantaban sus tribunas y su pista, se ubican edificios institucionales y zonas residenciales de Chamberí, uno de los distritos más elegantes y tradicionales de Madrid.
A pesar de su desaparición, el Hipódromo de la Castellana dejó una huella profunda en la historia madrileña. Fue el primer recinto deportivo moderno de la ciudad y un símbolo del cambio cultural que vivía España en los albores del siglo XX.
Curiosidades del Hipódromo de la Castellana

- Inauguración: 31 de mayo de 1878, día de la boda del rey Alfonso XII.
- Primeros partidos: Allí se disputaron los primeros encuentros de fútbol documentados en Madrid.
- Diseño original: Su pista medía 1.600 metros y estaba rodeada de gradas para más de 5.000 espectadores.
- Demolición: En 1933, tras más de medio siglo de historia.
- Ubicación actual: En el distrito de Chamberí, sobre el Paseo de la Castellana, una de las zonas más emblemáticas de la capital española.
Un símbolo perdido de la historia deportiva madrileña
Aunque hoy no quede rastro físico del Hipódromo de la Castellana, su legado perdura en la memoria de los deportes madrileños. Allí nacieron dos pasiones —la hípica y el fútbol— que moldearon la identidad deportiva de España.
Entre caballos, jinetes y futbolistas, este histórico recinto fue el escenario de un cambio de época que aún hoy sigue sorprendiendo a los curiosos y amantes de la historia.

