A simple vista, el surf es uno de los deportes más azarosos que existen. Al depender de las condiciones acuáticas, del viento y de la misma formación de las olas, pareciera que los surfistas no tienen mucho por hacer salvo esperar.
Sin embargo, el acto de deslizarse en una tabla sobre una ola en movimiento requiere de técnica, fuerza, sentido del equilibrio, entendimiento de las corrientes marítimas y de cuándo una potencial ola podría ser la ideal para disfrutar del deporte. Así, una práctica que en la actualidad se ha perfeccionado en realidad tiene siglos de historia.
¿Dónde se originó el surf?
Lo cierto es que determinar el origen del surf es complejo. Los primeros registros oficiales de la práctica datan de finales del siglo XVIII, cuando el explorador británico James Cook navegaba desde Tahiti (una isla de la Polinesia francesa) hasta Norteamérica. A mitad de camino, se encontró con un grupo de islas que hoy conocemos como Hawái.
Según cuenta la historia, Cook fue testigo de una práctica de surf incipiente que, sin embargo, no llegó a relatar en su diario de viaje porque murió en la expedición. Fue su segundo al mando, James King, quien registró la actividad acuática de los isleños. Esencialmente era un ejercicio similar al surf actual, pero con algunas diferencias en cuanto al tipo y tamaño de tabla. Además, generalmente sólo los jefes o habitantes de alto rango social podían entretenerse de esa manera.
A pesar de esos registros, distintos historiadores creen que, como los hawaianos eran migrantes de otras islas del océano Pacífico, llevaron una costumbre que también se desarrolló en lugares de la Polinesia francesa.
Algo similar ocurre con la versión que defiende el surgimiento del surf en la actual región de Perú. En la época del imperio incaico, se crearon los famosos "caballitos de totora", que consistían en tablas de la planta totora capaces de flotar en el agua. Dibujos de pescadores sobre estas tablas se encontraron en algunas cerámicas y paredes de cuevas, datando el origen del surf entre los siglos XIII y XVI.
¿Por qué los isleños practicaban surf?
Por los registros de los exploradores británicos, se cree que la práctica tenía dos motivos principales:
- Era un actividad de entretenimiento.
- Servía para que dos líderes tribales midieran su poderío.
También te puede interesar: Nazaré, la ciudad balnearia de Europa que es azotada por las olas más grandes del mundo
Así, quien lograba mantener el equilibro y surfear una o más olas demostrando habilidad, era beneficiado con un rango de mayor jerarquía. Por ello, lo que en la actualidad es uno de los deportes acuáticos competitivos por excelencia, en su momento estaba muy arraigado a las costumbres y cultura de los habitantes del Pacífico.
Con el tiempo la práctica se extendió al resto de Estados Unidos, y para inicios del siglo XX aparecieron algunas de sus figuras más emblemáticas, como George Freeth y Duke Kahanamoku. Kahanamoku fue uno de los pioneros del deporte, marcando el inicio del surf moderno.
