El 25 de julio de 1978, una bebé nacida en el norte de Inglaterra cambió para siempre la historia de la ciencia. Fue la primera persona en el mundo concebida fuera del útero materno, en un laboratorio, mediante la unión de un óvulo y un espermatozoide en condiciones controladas, lo que se conoce como fecundación "in vitro".
Aunque hoy esta técnica es utilizada en todo el mundo por personas con dificultades para concebir, en ese momento generó intensos debates científicos, éticos y religiosos. La noticia ocupó titulares en los diarios más importantes del mundo y despertó admiración, dudas y temores.
¿Cuánto pesó la primera persona en nacer por fecundación "in vitro"?

Louise Brown nació en el Royal Oldham Hospital de Manchester, por cesárea, con un peso de 2,6 kilogramos. El procedimiento que permitió su gestación fue realizado por el fisiólogo Robert Edwards, el ginecólogo Patrick Steptoe y la enfermera y embrióloga Jean Purdy, quien tuvo un rol clave aunque menos visibilizado por mucho tiempo.
En total, más de 80 intentos fallidos y casi una década de trabajo precedieron este nacimiento. Después de llegar al mundo, Louise fue sometida a más de 60 exámenes para verificar su salud. Los especialistas querían demostrar que no había riesgos ocultos en este nuevo método. En todos los estudios, Louise fue calificada como una bebé completamente sana.

Desde entonces, Louise lleva una vida normal y se mantiene alejada de la vida pública. Sin embargo, su nacimiento fue un hito en la historia de la medicina moderna y será siempre recordada por eso.
Los años anteriores al nacimiento de Louise Brown, la primera persona nacida gracias a la fecundación "in vitro"
El nacimiento de la “primera bebé de probeta” coincidió, además, con una fecha cargada de simbolismo: el 25 de julio se cumplían exactamente diez años de la publicación de la encíclica Humanae Vitae del Papa Pablo VI.
En ese texto, la Iglesia Católica se oponía de manera explícita a cualquier forma de fecundación artificial, lo que aumentó aún más las críticas y polémicas alrededor del caso.
Pero mientras parte de la sociedad expresaba rechazo, otros celebraban el avance como una esperanza concreta para muchas familias. La técnica “in vitro” no tardó en expandirse y perfeccionarse, y se estima que desde entonces permitió el nacimiento de cinco millones de personas en todo el mundo.
¿Por qué este nacimiento fue tan importante?

- Permitió el desarrollo de nuevas técnicas de reproducción asistida.
- Dio esperanza a personas con problemas de fertilidad en todo el mundo.
- Abrió debates sobre bioética que siguen vigentes hasta hoy.
En 2010, más de tres décadas después del nacimiento de Louise, Robert Edwards fue galardonado con el Premio Nobel de Medicina por su trabajo pionero. Sus colegas Patrick Steptoe y Jean Purdy no pudieron recibirlo: ambos habían fallecido antes de ese reconocimiento.

