La lavanda es una de las plantas aromáticas más reconocidas en el mundo. Sus flores, que van del púrpura al azul, desprenden un aroma inconfundible que conquistó a culturas muy diversas a lo largo de miles de años.
Perteneciente a la familia Lamiaceae, es originaria de la región mediterránea y se caracteriza por sus tallos leñosos, hojas estrechas de color verde grisáceo y flores dispuestas en espigas. Lo que pocas personas conocen es que la lavanda tenía un rol vital en un ritual muy conocido: la momificación en el Antiguo Egipto.
¿Cómo se usaba la lavanda en el Antiguo Egipto?
En el Antiguo Egipto, aunque no formaba parte directa del proceso químico de momificación, la lavanda sí era un ingrediente importante en la ambientación de tumbas y templos. Los aceites esenciales, con propiedades antibacterianas, se utilizaban para perfumar vendajes y espacios sagrados.
Los egipcios apreciaban la lavanda no solo por su fragancia dulce y penetrante, sino también por su capacidad para conservar y purificar. El incienso con lavanda era común en ceremonias religiosas, y su perfume acompañaba objetos y ofrendas. Esta tradición se extendió más tarde a griegos y romanos, quienes la incorporaron en baños, ungüentos y remedios.
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Con el tiempo, su cultivo se expandió por Europa y, en la Edad Media, se convirtió en un recurso habitual en boticas y jardines monásticos. Allí se utilizaba para preparar infusiones, aceites medicinales y también para alejar insectos, costumbre que se mantiene en la actualidad.
Usos actuales de la lavanda
El cultivo de la lavanda es sencillo y resistente, lo que la convierte en una opción popular para huertas urbanas y jardines domésticos. A eso se suma que se adapta a climas soleados y suelos bien drenados, y que tiene múltiples usos, como:
- Perfumería y cosmética: sus aceites esenciales son clave en perfumes, jabones y cremas.
- Gastronomía: aporta un toque floral a infusiones, repostería y recetas gourmet.
- Control natural de insectos: se emplea en bolsitas, sprays y velas para ahuyentar mosquitos y polillas, al igual que la citronella.
