Científicos creen que la acidificación de los océanos está sucediendo más rápido que en cualquier otro momento de la historia.
El fenómeno afecta a la mayoría de las criaturas que viven en el océano, especialmente a los corales, las ostras y otras criaturas con delicados caparazones o esqueletos de carbonato, que se debilitan hasta con el cambio más leve en el equilibrio ácido del mar.
¿Qué causa la acidificación en los océanos?
Los océanos siempre han absorbido y expulsado dióxido de carbono. Sin embargo, el intercambio solía producirse con lentitud, generalmente a lo largo de miles y miles de años.
La raza humana fue quien perturbó ese lento intercambio. Desde el inicio de la Revolución Industrial, allá por el siglo XVIII, los humanos han añadido unas 400.000 millones de toneladas de carbono a la atmósfera. Esto se debe a las enormes cantidades de combustibles fósiles que quemamos para obtener energía, la fabricación de cemento, la tala de bosques y otras acciones.
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Cada año, el océano absorbe alrededor del 25% de todo el CO2 extra emitido. En consecuencia, desde el inicio de la Revolución Industrial, el agua es un 28 % más ácida.
¿Por qué el CO2 acidifica el océano?
El CO2 acidifica el océano porque, cuando se disuelve en el agua, reacciona con el agua para formar ácido carbónico (H2CO3). Este ácido se disocia parcialmente en iones hidrógeno (H+) y bicarbonato (HCO3-).
El aumento de los iones hidrógeno en el agua reduce el pH, lo que significa que el océano se vuelve más ácido, resultando en el proceso conocido como acidificación oceánica.
¿Cuáles son las consecuencias de este fenómeno?
Las especies marinas son sumamente sensibles a los cambios de acidez de su hábitat acuático. Algunas consecuencias de la acidificación del océano son:
- Ralentiza la muda de cangrejos, langostas y otros crustáceos.
- Debilita los corales.
- Ablanda las conchas de las vieiras.
- Estresa y confunde a los peces al perturbar su sentido del olfato.
- Cambia la forma en que los sonidos se transmiten a través del agua, volviendo el entorno submarino más ruidoso que nunca.