La aldea de Belesar (San Bartolomeu de Belesar) está situada en el noroeste de España, en la comunidad autónoma de Galicia, provincia de Lugo. Pertenece a los municipios de Chantada y O Saviñao, y forma parte de la Ribeira Sacra, una de las zonas más bellas y verdes del noroeste ibérico.
Aunque algunos reportes mencionan que Belesar tiene 28 habitantes (dato aproximado y cambiante), otras fuentes lo describen con números similares ("poco más de veinte personas"), lo que lo convierte en un micropueblo.
Su fundación data de tiempos antiguos; aunque no hay un año exacto para su origen, Belesar aparece en documentos medievales. Durante la Edad Media, los reyes Alfonso VII y Alfonso IX impulsaron su parte perteneciente a Chantada como un burgo comercial con el deseo de que creciera como núcleo de paso. Pero ese proyecto no llegó a consolidarse plenamente.
El río Miño atraviesa la aldea, dividiéndola en dos orillas: la margen este pertenece a O Saviñao, donde se encuentran servicios como embarcadero y algunos restaurantes; la margen oeste, hacia Chantada, es más pequeña y conserva elementos más rústicos.
Naturaleza, paisaje y características de Belesar

La aldea de Belesar ofrece una naturaleza muy singular: viñedos en bancales escalonados que coronan laderas, reflejos del agua del río Miño, bosque atlántico que se mezcla con tierra de cultivo.
Entre sus características más destacadas:
- Iglesias y patrimonio: la Iglesia de San Bartolomé de Belesar y un peto de ánimas junto al puente sobre el río
- Edificaciones tradicionales: casas de piedra y madera, muchas con decoración mediante la técnica del esgrafiado.
- Historia romana: los Codos de Belesar, vestigios de la vía romana que conectaba Braga con Astorga, confirman que esta zona ha sido punto de paso estratégico desde tiempos antiguos.
- Gastronomía local y festividades: Belesar produce cerezas famosas, y dedica fiestas al fruto a finales de mayo o principios de junio.
Además, para los que aman las actividades al aire libre:
- Rutas de senderismo como la PR-G 183 (Viñedos de Belesar) atraviesan paisajes de viñedo y ribera del Miño.
- El embarcadero permite excursiones fluviales por el río.
¿Cómo visitarla y qué tener en cuenta?

- Cómo llegar: se puede acceder en coche desde las ciudades cercanas de Lugo u Ourense, atravesando la Ribeira Sacra. Una vez en Belesar, conviene llevar calzado cómodo para recorrer senderos y caminos empedrados.
- Mejor época: primavera (mayo-junio) para disfrutar de los festivales de cereza y del paisaje verde vivo; verano para rutas y paseos en barco; otoño para paisajes otoñales y recogida de cosecha.
- Alojamiento y servicios: es una aldea pequeña, con pocos servicios; los visitantes pueden hospedarse en casas rurales o pequeños alojamientos en pueblos cercanos. Para comer, hay algunos restaurantes en la margen del Miño perteneciente al municipio de O Saviñao.
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Belesar: un destino de ensueño

El encanto de Belesar reside tanto en su historia como en su paisaje. La aldea es parte de un laberinto de mitos, ruinas romanas, iglesias antiguas y delicias como las cerezas. Cada rincón refleja esa mezcla de abandono y conservación típica de muchos pueblos gallegos, donde el tiempo parece moverse más lento, pero no está detenido.
Es por eso que, aunque Belesar no se convirtió en el burgo comercial que soñaron los reyes medievales, su pequeña población, su división por el río Miño, sus rutas naturales y su atmósfera tranquila la han convertido en un destino destacado para quienes buscan naturaleza, historia y turismo rural en Galicia. Si viajas a España y quieres descubrir un lugar auténtico, Belesar merece un lugar en tu itinerario.
