La ciudad de Cádiz, en la costa de Andalucía, España, es famosa por su belleza marítima y su historia milenaria. Presidiendo el horizonte de la ciudad se encuentra una edificación majestuosa: la Catedral de la Santa Cruz sobre el Mar. Lo que la hace única, más allá de su tamaño y elegancia, es el increíble tiempo que tardó en completarse: más de 100 años.
El proyecto se inició en 1722, durante una época de gran prosperidad para Cádiz, gracias al comercio con América. Sin embargo, la construcción se detuvo en varias ocasiones debido a la falta de fondos y los problemas económicos de la ciudad. Esto obligó a que diferentes arquitectos tomaran las riendas a lo largo de cuatro generaciones, dando como resultado una fusión arquitectónica inesperada.
Catedral de la Santa Cruz: un proyecto que duró 116 años
El inicio de la obra de la Catedral de la Santa Cruz fue encargada al arquitecto Vicente Acero. Su diseño original seguía las líneas del Barroco, un estilo caracterizado por la grandeza, la ornamentación y la curva. Sin embargo, Acero abandonó el proyecto y el liderazgo pasó a manos de otros maestros, como Gaspar Cayón.
A medida que pasaban las décadas, el estilo arquitectónico predominante en Europa fue cambiando. Cuando la obra se acercaba a su finalización en el siglo XIX, bajo la dirección de arquitectos como Juan Daura, el gusto de la época se había inclinado hacia el Neoclásico, un estilo más sobrio, simétrico y simple. Esta evolución es la razón por la que la Catedral de la Santa Cruz es un edificio de contrastes: sus partes más antiguas son barrocas y las más recientes, como su impresionante fachada principal, son neoclásicas.
La catedral fue consagrada y abierta al culto en 1838, 116 años después de que se colocara la primera piedra. Esta larga espera es un reflejo de los altibajos económicos que vivió la ciudad de Cádiz durante ese período.
Mirá También
Drago de Gran Canaria: la curiosa planta de España que está en peligro crítico de extinción
Hitos y nombres clave del templo
- Inicio de Construcción: 1722 (a cargo de Vicente Acero).
- Consagración (Apertura): 1838 (más de un siglo después).
- Estilos Principales: Barroco (interior) y Neoclásico (exterior y cúpula).
- Dimensiones: Posee 3 naves, con una longitud de 85 metros.
La cúpula dorada y curiosidades de la Catedral de la Santa Cruz
La característica más llamativa y fotografiada de la Catedral de la Santa Cruz es, sin duda, su inmensa cúpula central. A diferencia de otras cúpulas de piedra o cobre, la de Cádiz está revestida con tejas cerámicas de un llamativo color dorado que brilla intensamente bajo el sol andaluz, dándole el apodo de "la Catedral Dorada".
Otra curiosidad que fascina a los visitantes es que se puede subir a la Torre de Poniente, una de las dos torres principales del templo. Esta subida ofrece una de las vistas panorámicas más espectaculares de Cádiz y del Océano Atlántico, permitiendo admirar desde lo alto la intrincada mezcla de estilos de la construcción.
Visitar la Catedral de la Santa Cruz es realizar un viaje a través de la historia de la arquitectura española, viendo con los propios ojos cómo un proyecto puede sobrevivir a más de cien años de cambios, guerras y evoluciones artísticas, manteniendo su belleza inigualable.
