Olga Elisa Painé nació el 23 de agosto de 1943 en Río Negro. Legalmente sus padres no pudieron anotarla con un nombre mapuche, por lo que eligió el nombre “Aimé” para ser reconocida en el ámbito artístico. También se la conoció como la “Princesa Mapuche”. Se destacó por rescatar y difundir la música folclórica de su comunidad.
Los primeros pasos de Aimé Painé en el ámbito artístico
Aimé Painé estudió música y, desde chica, se destacó por interpretar en la escuela cantos gregorianos. En 1973, a los 29 años, ingresó al “Coro Polifónico Nacional” y descubrió el significado de la música para ella.
En un encuentro coral latinoamericano en Mar del Plata, en 1974, Aimé Painé notó que mientras todas las delegaciones interpretaban canciones indígenas de sus países, el coro argentino no las tenía en su repertorio. Esa inquietud la movilizó a la investigación sobre sus propios orígenes y descubrió que la música mapuche era una verdadera atracción espiritual, que su música provenía de la experiencia de cantar en un universo de soledad en el que se encontraba su tierra natal.
Su legado
Aimé Painé fue la primera mujer mapuche en cantar en el idioma de su comunidad con la vestimenta tradicional. Recorrió medio continente con su forma de cantar, hizo investigaciones antropológicas y viajó a Ginebra para participar en sesiones de la ”Subcomisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas”. Falleció el 10 de septiembre de 1987 en Paraguay.
