Horizonte sin final, el cielo y la tierra fundidos en uno solo: los salares son definitivamente uno de los paisajes más fascinantes para los viajeros del mundo. El desierto de sal más grande del mundo está en Sudamérica, y se trata del Salar de Uyuni. Su superficie territorial abarca 10 582 kilómetros cuadrados sobre el Altiplano.
Esta maravilla natural, producto de los lagos prehistóricos que se evaporaron hace tiempo, se encuentra localizada en el departamento de Potosí, Bolivia. Es uno de los principales puntos turísticos de este país: recibe alrededor de 300.000 viajeros al año. En 2019 fue premiado por World Travel Awards como el “Mejor Atractivo Turístico Natural de Sudamérica”.
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¿Cómo llegar al desierto de sal más grande del mundo?
Existen múltiples formas de llegar, dependiendo del lugar del que se provenga. Los tours principales salen desde los siguientes puntos:
- Uyuni, Bolivia: es el punto de salida más popular de los tours al salar.
- San Pedro de Atacama, Chile
- Tupiza, Bolivia
¿Cuál es el mejor momento para conocerlo?
El clima del salar de Uyuni se divide en dos: por un lado la estación lluviosa y la estación seca.
La estación lluviosa abarca los meses de diciembre a abril. En esta época se da el tan esperado fenómeno del espejo del salar, gracias al efecto que generan las ligeras lluvias en el suelo. Puntualmente, los meses con exceso de precipitación son diciembre y enero. No se recomienda ir durante los mismos ya que las excursiones podrían llegar a cancelarse.
Por otro lado, la estación seca inicia en mayo y finaliza en noviembre. Se caracteriza por temperaturas frías y el suelo está endurecido. Lo positivo es que los turistas pueden andar con vehículos a través del paisaje y llegar a lugares más remotos a los que no pueden durante la época de lluvias.