Hace 80 años nació Droopy, uno de los personajes más famosos y queridos del mundo de la caricatura. La característica de su omnipresencia es recordada a tal punto que su nombre se utiliza como apodo para las personas que aparecen por todos lados. A continuación, un repaso por su historia.
¿Cuándo nació Droopy?
Este entrañable personaje debutó protagonizando Dumb hounded (“El Sabueso tonto”), el 20 de marzo de 1943. Dumb hounded fue un corto animado dirigido por Frederick “Tex” Avery para la compañía estadounidense Metro-Goldwyn-Mayer.
La primera escena donde aparece consiste en el personaje dirigiéndose a la audiencia y diciendo "hola gente feliz… ¿saben algo? Yo soy el héroe". Durante el capítulo, Droopy está tras la pista de un convicto que escapó de la cárcel. La voz y personalidad de Droopy estaban basados en el personaje Wallace Wimple de la comedia radial Fibber McGee and Molly; el actor Bill Thompson, quien interpretó a Wimple, hizo la voz original de Droopy. El personaje ha sido interpretado por otros actores de voz, incluyendo a Don Messick, quien repitió el rol en los años 1990.
Probablemente su cortometraje más famoso es Northwest Hounded Police, donde Droopy aparece literalmente en todos los sitios donde el villano intenta huir. Droopy era un actor versátil: podía interpretar a un policía, un vaquero, heredor, entre otros.
Lo que hacía al personaje más divertido era su increíble fuerza, debido a su estatura y carácter. Solo cuando estaba molesto demostraba esta habilidad, casi siempre acompañado de la frase "¿Sabes algo? Eso me enfurece". Tras esto golpeaba al villano y lo lanzaba sobre su cabeza.
El creador
Detrás de la marca Droopy se encuentra Frederick Bean Avery, alias Tex, oriundo de Taylor, Texas. A pesar de no ser un nombre tan popular, dejó sello inolvidable en la historia de la animación.
Avery nació en Taylor, Texas el 26 de febrero de 1908 y falleció en Burbank, California, el 26 de agosto de 1980. Cuando trabajaba en el estudio de Walter Lanz sufrió un accidente que le hizo perder un ojo. Fue jugando a arrojarse clips con cintas elásticas con sus compañeros de trabajo. Para algunos historiadores de la animación, esto influyó en su estilo bidimensional. También se dice que esto influyó en su forma de hacer humor, donde lo inesperado es esencial.
Avery es el creador de muchísimos más personajes. En la lista figuran Bugs Bunny, el Pato Lucas, Porky, Elmer Fudd y Chilly Willy, entre otros.
Tomás Eliaschev, periodista especializado en animación, afirma que "la exageración, la irreverencia, el sarcasmo, el absurdo, el surrealismo y el humor de ritmo desenfrenado son marcas del estilo de Avery, así como la costumbre de romper la cuarta pared e interpelar al espectador o de poner de manifiesto lo que se está viendo es una obra cinematográfica".