La naturaleza y la vida silvestre inspiran respeto y admiración. Hay lugares del mundo que destacan como verdaderos baluartes de la biodiversidad, desde los vastos humedales del Pantanal hasta las remotas Islas de Georgia. Estas zonas tienen un rasgo común: su abundancia de fauna y, en especial, la concentración de ciertos animales dentro de sus perímetros.
Muchos de estos lugares terminan convirtiéndose en destinos turísticos, justamente por la presencia multitudinaria de animales que poseen. La convergencia de la naturaleza nos revela los paisajes más sorprendentes y biodiversos.
1. Carpinchos en Sudamérica
Los carpinchos -también conocidos como capibaras- son una especie animal especialmente abundante en ciertas áreas de Sudamérica, como los humedales del Pantanal en Brasil y Paraguay. El Pantanal es el humedal de agua dulce más grande del mundo y su riqueza en biodiversidad se extiende a lo largo de tres países:
- Brasil.
- Bolivia.
- Paraguay.
Además, este espacio alberga una de las más altas concentraciones de vida silvestre de América Latina, entre la que se encuentran los carpinchos. Estos roedores gigantes se relajan en colchones de pasto, zambullen en el pantano y desplazan elegantemente por el espacio en grupos de 10 a 20 individuos.
En Argentina, se vivió en 2021 la "invasión de carpinchos" de Nordelta, Provincia de Buenos Aires. Acá también, por un tiempo, abundó la concentración de estos roedores. Sin embargo, la "invasión" en verdad no había sido de los carpinchos hacia los humanos sino al revés, hace 20 años, cuando comenzó la construcción de casas y barrios en Delta, el hábitat propio de esta especie animal.
2. Ciervos en Japón
En el Parque Nara, Japón, los ciervos sika son abundantes y se les permite vagar libremente. Décadas atrás eran considerados mensajeros divinos en la religión sintoísta, lo cual llevó a su protección y la posterior concentración de su población en esta área.
Después de la Segunda Guerra Mundial, los ciervos fueron oficialmente despojados de su estatus sagrado pero fueron designados monumento nacional y protegidos como tales. Hoy en día, los visitantes pueden acercarse a ellos, acariciarlos y hasta comprar galletitas para alimentarlos.
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3. Pingüinos en la Isla de Georgia del Sur: animales en masa
La Isla de Georgia del Sur, ubicada en el Atlántico Sur, alberga enormes colonias de pingüinos rey y pingüinos macarrones. Las imágenes de estas colonias son impresionantes, con miles de ejemplares reunidos constantemente en las playas.
Junto a las islas vecinas, las Sándwich del Sur, albergan un cuarto de los pingüinos del planeta. Son aproximadamente unos 7.000 km2 llenos de estos simpáticos animales que andan de traje.
4. Focas en la Bahía de Heligoland, Alemania
La Bahía de Heligoland, situada en las costas de Alemania, es conocida por ser un hábitat importante para las focas grises y focas comunes. Las primeras tienen un pelaje más grueso y áspero y pueden superar los 2.5 metros de alto, mientras que las segundas -llamadas "comunes"- poseen un pelaje más corto y suave, que puede variar del gris al marrón, y son más pequeñas comparadas con las grises.
Este rincón marino se convierte en un santuario vital durante la época de reproducción, cuando grandes cantidades de focas se congregan en las playas de la bahía y casi no dejan espacio sin ocupar.
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5. Abundan otros animales: Murciélagos en Borneo
Deer Cave está escondida en el Parque Nacional Gunung Mulu de la Isla de Borneo y alberga una multitud de murciélagos gigantes. De día no se los ve demasiado, pero a medida que la oscuridad va cubriendo el bosque, millones de murciélagos emergen de las profundidades de la cueva en busca de comida.
El espectáculo no sólo muestra el tamaño de las colonias de murciélagos, sino que también juega un papel importante en el ecosistema local, ayudando a controlar los insectos y mantener el frágil equilibrio en la cadena alimentaria.
