Jane Austen nació en diciembre de 1775 y era la séptima hija de ocho hermanos. Como nunca se casó y su hermana enviudó muy joven, una vez que el padre falleció las dos hijas y la madre, presionadas por la falta de dinero, debieron abandonar la casa y mudarse a una propiedad que le pertenecía a Edward, uno de sus hermanos, en el pueblo de Chawton.
A casi 75 kilómetros al sur de Londres, en el distrito de Hampshire, se encuentra este pueblo en el cual la escritora vivió desde 1809 hasta sus últimos días en 1817. Con más de 400 años de historia, la vivienda actualmente es un museo que permite acercarse al espíritu de la autora de grandes obras como Orgullo y Prejuicio, Emma y Persuasión, entre otras.
La casa de Jane Austen
Los ladrillos rojizos de la vivienda contrastan con el imponente verde del jardín que la rodea, lleno de flores y árboles perfectamente cuidados. Allí se puede observar una soga de la cual cuelgan vestidos de la época que simulan estar secándose al sol. Al ingresar, lo primero que se ve es la cocina, un espacio finamente curado con objetos de la época y recetas escritas a puño y letra por las mujeres de la familia.
Luego, hay una “sala de dibujo”, la cual funcionaba como un espacio de diversas actividades como coser, jugar a las cartas y tomar el té. Además, hay una biblioteca con algunas de las lecturas favoritas de Jane, en la cual se encuentran autores como Henry Fielding, Samuel Richardson, y Frances Burney.
Asimismo, la sala cuenta con un piano que la autora solía tocar por las mañanas antes de tomar el desayuno, y sobre él un retrato del hermano dueño de la propiedad. Y hacia un costado, hay un árbol genealógico junto a una primera edición de la novela Mansfield Park de 1814.
El rincón de la escritura
Saliendo por un pasillo, se llega al comedor, modesto pero no menos importante. Junto a la ventana, hay una pequeña mesa de madera donde Jane Austen solía sentarse a escribir sus novelas. Incluso hasta el final de sus días a los 41 años, la escritura seguía siendo un hábito discreto en su vida del cual no le gustaba alardear.
Al subir unas estrechas escaleras se llega a las habitaciones. La principal le pertenecía a su madre y era el ambiente más grande de toda la casa. Sobre una de las paredes yace un retrato de Edward Collins, quien era primo de Jane por parte materna. Se cree que el personaje de William Collins de Orgullo y Prejuicio está inspirado en él.
Hacia la derecha está la habitación de Jane, la cual tiene una ventana que da al jardín y sobre la cama se observa un vestido verde claro que es el mismo que usó Anne Hathaway en la película de 2007, Becoming Jane.
Finalmente, hay dos habitaciones más con objetos que pertenecieron a distintos miembros de la familia. Los más destacados son algunas joyas que le obsequiaron los hermanos marineros a las mujeres de la familia Austen, y junto a ellas se pueden observar las cartas originales que certifican los regalos.