Los moais son estatuas monolíticas humanoides ubicadas en la isla de Pascua (Chile). Se constituyen como el principal atractivo turístico de la isla.
La historia de los moais
En la isla de Pascua hay más de novecientos moais, que fueron esculpidos por los antiguos habitantes de la etnia rapanui. Muchos de ellos fueron labrados en toba, un tipo de roca volcánica perteneciente al cráter volcánico “Rano Raraku”. Se estima que las estatuas fueron construidas entre el 700 d.C y el 1600 d.C. Diversos elementos en el lugar indican que la cantera fue abandonada repentinamente, razón por la cual quedaron estatuas a medio labrar.
Prácticamente todos los moais terminados, originalmente situados sobre una plataforma o altar ceremonial, fueron derribados por los isleños nativos en el siglo XV. Desde 1956 unos pocos de ellos han sido restaurados. En un principio, estas estatuas gigantes tenían también unos moños de piedra roja de más de diez toneladas, que se extraían del cráter volcánico de Puna Pau.
El significado de los moais
Todavía se considera incierto el significado de los moais. Hay varias teorías en torno a estas estatuas. La más extendida dice que las estatuas fueron talladas por los habitantes polinesios de la isla, entre los siglos IX y XVI, como representaciones de antepasados difuntos.
Otra teoría sugiere que estas estatuas fueron hechas para señalar los lugares donde se encontraba el agua potable, un recurso difícil de hallar en esa isla volcánica. Se ha descubierto que en los lugares donde no hay moais, tampoco hay agua dulce. En cambio, en los sitios donde hay moais, inclusive en el interior de la isla, hay fuentes cercanas de agua potable.
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