La localidad, que representa el hogar de 2.475 personas, se expandió alrededor de una fortaleza histórica, inaugurada en el siglo XIII.
Al visitar la ciudad de Morella, en España, los turistas pueden imaginar, sin grandes limitaciones, cómo era su paisaje hace 800 años, ya que la geografía del lugar se mantiene intacta desde el siglo XIII.
En aquel momento, las autoridades del lugar decidieron construir un gigantesco castillo en el punto más alto del terreno. Y, con el correr del tiempo, se edificaron pequeñas casas a su alrededor.
Entonces, aunque Morella tiene muchas otras atracciones dignas de conocer, casi todos los viajeros que la incluyen en su itinerario, llegan con la ilusión de apreciar cada detalle de la fortaleza medieval.
Al igual que sucede en muchos pueblos de Europa, Morella no tiene una fecha de fundación exacta. Pero, gracias al trabajo realizado por historiadores, se pudo comprobar en qué momento ocurrieron los sucesos más históricos.
Por un lado, entre las montañas de hasta 1.300 metros de altura que hay en la localidad, se detectaron pinturas rupestres que tienen 7.400 años de antigüedad. Entonces, en aquella época la zona ya estaba poblada.
En segundo lugar, otra fecha importante que marca el comienzo de una nueva vida en Morella es la edificación del castillo homónimo, que permanece en pie desde hace 800 años.
Finalmente, una de las mayores curiosidades del pueblo es que, si bien funciona como un espacio residencial desde hace miles de años, no ha crecido en términos demográficos. Actualmente, tiene solo 2.475 habitantes.
Como consecuencia de su importancia y antigüedad, el Castillo de Morella es el principal atractivo de la localidad y uno de los más relevantes de la provincia de Castellón y de la Comunidad Valenciana.
Cada día, cientos de personas se animan a escalar la montaña donde se encuentra para observar, en detalle, sus muros de piedra, las gigantescas torres de vigilancia y los tres niveles de la construcción principal.
Pero, una vez que finaliza el paseo por la fortaleza, los viajeros deben tener en cuenta que Morella tiene muchos otros sitios interesantes para conocer que, en algunos casos, son incluso más longevos que el castillo.
Un claro ejemplo es el yacimiento visigodo del Mas Sabater, donde se encuentran los restos de un edificio que podría haber alcanzado 12 metros de altura tras su inauguración, en el siglo VII.
Por último, el recorrido por el casco histórico de esta localidad española no puede finalizar antes de incluir una breve parada en:
Ingresar a la localidad de Morella es muy sencillo por la enorme cantidad de vías de acceso disponibles, así como también su cercanía con otras ciudades más grandes.
De todas formas, la carretera más elegida por los viajeros es la N232, que la une al sur con la ciudad costera de Vinaròs, y al norte con el histórico y pintoresco pueblo de Valdealgorfa.
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