¿Por qué los baños termales Széchenyi son los más grandes de Europa?

A temperaturas ideales, estos baños termales aportan múltiples beneficios al cuerpo. Conocé en qué ciudad de Europa del Este se ubican, y por qué es conocida como la "Capital mundial de aguas termales medicinales".

Publicado por

Natalia Sivina

Los baños termales Széchenyi, ubicados en Budapest, Hungría, son un conjunto de piletas y saunas que se distribuyen al aire libre y al interior de una construcción soñada: un gran edificio de estilo barroco moderno, con tres cúpulas e infinitas columnas. Está ubicado en Városliget (Parque de la Ciudad), uno de los pulmones verdes de la ciudad.

Como Budapest está ubicada en una falla geográfica, tiene más de 120 fuentes termales, lo que le valió el título de "Capital mundial de aguas termales medicinales". Además, los baños Széchenyi son los más grandes de Europa. Su arquitecto fue Győző Czigler, y se inauguraron en 1913.

¿Cómo es el castillo de los baños termales Széchenyi?

La construcción del "castillo" duró cuatro años. Más de tres décadas atrás, se habían perforado los pozos que dieron origen a los baños termales. Uno de ellos, a 970 metros de profundidad, estaba a 74.5ºC, y el otro, a 1.240 metros, tenía una temperatura de 77ºC. A partir de la década de 1920, el complejo fue modificado varias veces:

1927 - Se hizo la primera reforma, ampliando la cantidad de piletas.
1938 - Se perforó el segundo pozo, ya que el primero se quedaba corto.
1944 - Budapest fue bombardeada durante la Segunda Guerra Mundial, y el edificio quedó muy dañado. Al poco tiempo se reconstruyó.

En su interior, el "palacio" de Széchenyi tiene decoraciones de monstruos marinos, peces, almejas, sirenas y otras figuras míticas y marinas. En sus patios internos, también hay estatuas de estas figuras fantásticas.

¿Qué beneficios trae bañarse en aguas termales?

Las aguas termales medicinales tienen distintos efectos sobre el cuerpo. Por un lado, ayudan a reducir el estrés y a recuperar la energía. Por otro, relajan los músculos, las articulaciones y las contracturas, y son antiinflamatorias y analgésicas, por lo que son muy recomendadas al momento de tratar enfermedades reumáticas.

Además, también ayudan en la limpieza de la piel, ya que abren los poros y eliminan impurezas. La oxigenan, mejoran la circulación sanguínea y además estimulan el sistema inmune, fomentando la producción de endorfinas.