Existe un lugar en el planeta Tierra llamado Punto Nemo, que es la zona más alejada de cualquier actividad humana. Está ubicado a unos 4800 kilómetros de la costa este de Nueva Zelanda y a unos 3200 kilómetros del norte de la Antártida. Específicamente, se encuentra entre Nueva Zelanda, La Antártida y La Isla de Pascua.
En Punto Nemo prácticamente no hay vida, solo viven bacterias y algunos cangrejos porque, al estar localizado en un lugar tan lejano a tierra firme, los vientos no alcanzan a arrastrar materia viva. Es un espacio inaccesible para los seres humanos.
Este lugar, también conocido como “Polo oceánico de inaccesibilidad”, es todo un cementerio submarino de naves espaciales porque muchos satélites antiguos y otros desechos espaciales se han estrellado allí. El lugar es usado como sitio de descarga porque no tiene flora ni fauna, por lo cual no representa un peligro para el ecosistema. Así, los artefactos espaciales salen de órbita y comienzan su caída hacia la Tierra dirigiéndose al Punto Nemo. Se estima que allí ya cayeron aproximadamente unos 300.
El Punto Nemo recibe el nombre del capitán de la novela de Julio Verne, Veinte mil leguas de viaje submarino, y es el punto en el océano que está más alejado de la tierra.
La Estación Espacial Internacional
La Estación Espacial Internacional (EEI), el gran módulo espacial que ha estado en órbita desde el año 1998, será destruida y llevada al fondo del océano pacífico en 2030, según informó la NASA. Una vez fuera de órbita, la EEI realizará un gran descenso y aterrizará precisamente en Nemo Point o Punto Nemo.
La Estación Espacial Internacional es una estación modular ubicada en la órbita terrestre baja. Además, es un proyecto conjunto en el que participan cinco agencias espaciales: NASA (Estados Unidos), Roscosmos (Rusia), JAXA (Japón), ESA (Europa), y la CSA (Canadá). Este lugar sirve como laboratorio de investigación en microgravedad y ya se han hecho más de tres mil estudios de astrobiología, astronomía, meteorología y física, entre otros campos. Además, se utilizó como zona para hacer pruebas de equipamiento y sitio de recepción de astronautas.
Esta estación también está capacitada para probar los sistemas y equipamiento necesarios para la realización de vuelos espaciales de larga duración como pueden ser las misiones a la Luna y Marte. Hasta abril de 2021, la Estación Espacial Internacional ha sido visitada por 244 personas, entre las cuales se encuentran astronautas, cosmonautas y turistas espaciales de 19 naciones diferentes.
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