De todas las especies nativas de Sudamérica, hay una planta invasora que es considerada la más dominante del mundo y ha llegado a otras regiones como consecuencia de su belleza.
Su nombre científico es “pontederia crassipes”, pero es conocida con el nombre de “jacinto de agua dulce” y suele crecer con facilidad en tierras húmedas y lagos, ubicados en sitios templados.
Y, si bien no representa un peligro directo para los humanos, sí interfiere en procesos naturales que pueden modificar el paisaje o impedir el desarrollo de otras especies.
¿Por qué el jacinto de agua dulce es una planta invasora?
A simple vista, el jacinto de agua dulce es una planta flotante muy pintoresca, que suele crecer con rapidez y en abundancia, en cualquier sitio del planeta que tenga temperaturas promedio de entre 12°C y 35°C.
Pero, con el correr de los años, expertos han detectado que todas las otras especies, de animales y plantas, que conviven con la “pontederia crassipes”, han sufrido múltiples cambios o incluso desaparecieron.
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Es por eso que, tras investigaciones, se logró confirmar que el jacinto de agua dulce es la planta invasora más dominante del mundo porque, con solo su presencia, logra:
- Absorber los nutrientes que necesitan muchos peces para alimentarse y sobrevivir.
- Dañar a otras plantas de la región y evitar su crecimiento.
- Emitir grandes cantidades de dióxido de carbono y gas metano al descomponerse, como consecuencia de su habilidad para absorber sustancias tóxicas.
¿Cómo se ha expandido el jacinto de agua dulce en el mundo?
Como hemos mencionado, el jacinto de agua dulce es una especie nativa de Sudamérica, que principalmente crece en grandes cuerpos de agua ubicados en la región amazónica.
Es por eso que, durante años, científicos se han esforzado en descifrar cómo es posible que, en la actualidad, se encuentre en lagos de América del Norte, África, Europa y Asia.
Finalmente, llegaron a la conclusión de que el punto de partida para su expansión tuvo lugar hace 200 años, cuando exploradores estadounidenses recorrieron los ríos del Amazonas, recolectaron ejemplares y los trasladaron a su país de origen.
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Según los registros históricos, el motivo de su accionar fue aprovechar la belleza del jacinto de agua dulce para crear ornamentos únicos, donde predominó el color violeta de sus hojas, sin saber el efecto negativo que la especie tendría en su nuevo hábitat.
Actualmente existen cientos de proyectos para controlar el avance y las consecuencias de la especie, pero no son suficientes. Es decir, eliminar el jacinto de agua dulce es complejo porque:
- Requiere una inversión millonaria.
- Los ejemplares se reproducen a gran velocidad.
- Las semillas pueden permanecer durante años sin germinar. Por lo tanto, luego de retirar todos los jacintos, fácilmente se puede formar una nueva población.
¿Qué características de esta especie permiten identificar a los ejemplares?
El jacinto de agua dulce es un tipo de planta muy fácil de identificar, principalmente por el nítido color violeta de las hojas anchas y flores que crecen sobre el tallo, capaz de medir hasta un metro de altura.
Además, estas hojas son gruesas, brillantes y largas (hasta 20 centímetros de longitud). Por lo tanto, impiden que los ejemplares pasen desapercibidos en un entorno natural.
