En los días más fríos del invierno, muchas personas dicen que hace “frío polar”. Esta frase, que parece exagerada, en realidad se basa en una clasificación meteorológica muy precisa. El término se utiliza para describir un tipo de masa de aire muy frío que proviene de las regiones polares del planeta, como el Ártico y la Antártida.
Estas masas de aire polar pueden avanzar hacia zonas más templadas, como el sur de América o parte de Europa, generando descensos bruscos de temperatura, heladas, nevadas y sensación térmica muy baja. En Argentina, por ejemplo, se ha registrado este fenómeno muchas veces, y cada año durante el invierno se vuelve noticia.
El Servicio Meteorológico Nacional y organismos como el Sistema Nacional para la Gestión Integral del Riesgo (SINAGIR) usan esta expresión cuando detectan la llegada de estas masas de aire frío a nuestro territorio.
Frío polar: ¿qué significa desde el punto de vista climático?
En climatología, el clima polar es uno de los más extremos del planeta. Se caracteriza por temperaturas medias mensuales que no superan los 0 °C, inviernos muy prolongados y veranos casi inexistentes. Este tipo de clima predomina en zonas cercanas a los polos, como Groenlandia, el norte de Canadá y la Antártida.
El uso de la expresión “frío polar” en medios de comunicación y conversaciones cotidianas no se refiere necesariamente a que haya llegado un clima polar a una región, sino a que el aire que la afecta proviene de esas zonas y, por lo tanto, genera condiciones meteorológicas similares, aunque de menor intensidad.
Cuando ocurre una “ola polar”, por ejemplo, es común que las temperaturas mínimas bajen por debajo del promedio habitual durante varios días seguidos, y que se mantengan las alertas por frío extremo en muchas provincias.
Algunos datos sobre el “frío polar”:
- Origen del término: proviene de la clasificación de masas de aire en meteorología.
- Clima polar: presente en zonas cercanas a los polos, con temperaturas bajo cero todo el año.
- Aplicación local: se usa cuando una masa de aire polar afecta regiones más templadas.
Más que una expresión: una señal de alerta
Aunque muchas veces usamos “frío polar” como una exageración simpática para describir el frío intenso, en meteorología es un término serio que puede indicar riesgos para la salud, como hipotermia o enfermedades respiratorias. Por eso, cuando se anuncian olas de frío polar, es importante tomar precauciones, como abrigarse bien, evitar la exposición prolongada al aire libre y prestar atención a los grupos más vulnerables.