Vivimos comunicándonos con los demás. Se trata de una función propia de los seres humanos. Pero lo más interesante es que el acto de comunicar es un camino de ida y vuelta: uno puede analizar el mensaje que recibe y aceptarlo, difundirlo o rechazarlo. En esta oportunidad, Billiken te va a contar la historia de los diarios y las revistas y, en otras notas, te va a hablar sobre otros medios de comunicación. 

Todo empezó con Gutenberg 

En un determinado momento histórico, los libros dejaron de escribirse a mano y aparecieron los diarios, las revistas y los periodistas. Pero no fue de repente: tuvieron que transcurrir muchos años hasta que a alguien se le ocurriera difundir las noticias en hojas impresas de manera diaria. El orfebre alemán Johannes Gutenberg inventó en 1440 la imprenta de tipos móviles, pero lo primero que surgió de ella no fue un diario, sino un libro: la Biblia. Durante los siglos XV y XVI no hubo prensa escrita. Recién en el XVII se editaron los primeros periódicos, que todavía no eran diarios. Los periódicos no aparecían todos los días, sino una vez por semana, cada quince días o una vez por mes. 

El primer diario

El primer diario vio la luz recién en el siglo XVIII en Inglaterra. Se trató del “Daily Courant”, cuya novedad no solamente fue que salía cada mañana, sino que además incorporaba la publicidad en sus ediciones. Pero no tuvo muchos imitadores. Hubo que esperar hasta el siglo XIX, para que surgieran en casi todo el mundo los grandes diarios matutinos y vespertinos. Desde entonces se hizo costumbre su lectura durante el viaje al trabajo o en casa, para enterarse de lo que pasa en el mundo.

Los periodistas

Con la aparición de los periódicos y de los diarios surgieron los periodistas, que son quienes se encargan de escribir las noticias y los comentarios. Se considera a la prensa escrita como “la madre del periodismo” porque antecedió en el tiempo a los medios audiovisuales.

La labor de los periodistas

Si la noticia, por ejemplo, es que chocó un camión, el o la periodista concurre al lugar del hecho y recopila información sobre lo que pasó preguntando a los testigos del accidente y a los funcionarios públicos lo que saben o recuerdan. Con ese material va a la redacción del diario y escribe la nota. Antes de publicarse, el jefe del periodista lee la nota y, si la aprueba, un corrector la examina para que no haya errores. Después de dar ese paso, la información finalmente se publica y se da a conocer al mundo. 

Las revistas temáticas

Una de las grandes novedades editoriales del siglo XX fue la aparición de las revistas temáticas, que constituyen una especialización del contenido. Así fue como empezaron a editarse revistas dirigidas al público femenino, a los fanáticos de los deportes, a los interesados por la cultura y el espectáculo, a los seguidores de la ciencia, al mundo infantil, a los admiradores de la moda, etcétera. 

Un diario por dentro

Se trata de una empresa en la que trabajan varias personas: periodistas, fotógrafos, diseñadores, personal administrativo y muchas más. La imprenta puede estar o no en el mismo edificio que la redacción. Los diarios, luego de ser impresos, se distribuyen en los kioscos y otros puntos de venta por medio de un conjunto de camiones. El diario inglés “The Sun”, por ejemplo, vende por día 2 millones de ejemplares. 

Diferencias entre los diarios y las revistas

A diferencia de los diarios o los periódicos, las revistas surgieron para hacer un análisis más detallado y comentado de las noticias. Las primeras revistas aparecieron en Alemania, Inglaterra y Francia, e incluían dibujos e infografías en su interior. La invención de la fotografía en el siglo XIX representó una nueva era para este medio de comunicación.

También te puede interesar: Medios de comunicación: las agencias de noticias