La historia de Mariani Griselda Pastoriza es la de una mujer que, con pasión por la astronomía y compromiso con la igualdad, dejó una huella imborrable en la ciencia. Nacida en Santiago del Estero en 1939, se convirtió en una de las astrónomas más destacadas de América Latina y en una referente para las generaciones de investigadoras que la sucedieron.
Mariani Griselda Pastoriza y el descubrimiento que cambió la astronomía
Pastoriza estudió en la Universidad Nacional de Córdoba y, desde sus primeros pasos, se enfocó en el estudio de las galaxias. Junto al astrónomo José Luis Sérsic, describió un nuevo tipo de galaxia con núcleos brillantes y activos, que hoy son conocidas como galaxias Sérsic-Pastoriza. Este hallazgo marcó un antes y un después en la astronomía internacional, al abrir nuevas líneas de investigación sobre la evolución y el comportamiento de las galaxias.
Su carrera también la llevó a Brasil, donde se desempeñó como profesora en la Universidad Federal de Río Grande del Sur, contribuyendo a consolidar la astronomía en la región.
Una vida dedicada a abrir caminos para las mujeres en la ciencia
Además de sus logros científicos, Mariani Griselda Pastoriza fue una defensora de la inclusión de mujeres en la astronomía. Durante décadas, trabajó para que existiera un cupo femenino en instituciones científicas y luchó contra la desigualdad de género en los espacios académicos.
Su legado no solo se mide en descubrimientos, sino también en las oportunidades que ayudó a crear para que más mujeres pudieran acceder a la ciencia. En 2019, la Universidad Nacional de Córdoba le rindió homenaje como una de las investigadoras que transformaron la disciplina.
El legado de Mariani Griselda Pastoriza
Recordada como una científica brillante y una militante por la igualdad, Pastoriza dejó tres hitos que marcan su importancia:
- 1939: año de su nacimiento en Santiago del Estero.
- Década de 1970: descripción de las galaxias Sérsic-Pastoriza, reconocidas internacionalmente.
- 2019: homenaje de la Universidad Nacional de Córdoba por su trayectoria y aporte a la ciencia.
Hoy, su nombre sigue vivo en la historia de la astronomía y en el ejemplo que dejó para quienes sueñan con mirar el cielo y descubrir sus secretos.
