Cruzar el famoso Canal de la Mancha a nado es un desafío que al día de hoy, en pleno 2024, es complejo y muy peligroso. Por lo tanto, no es necesario resaltar cómo era la experiencia en 1875.
Aunque nadie había logrado una hazaña de las mismas características, el nadador británico Matthew Webb se lanzó a este enorme cuerpo de agua y logró atravesarlo con éxito.
Tras la aventura, se convirtió en una celebridad mundial y fue por más. Lamentablemente, en una de sus “pruebas imposibles”, perdió la vida a los 35 años.
¿Cuándo empezó a nadar Matthew Webb?
Matthew Webb nació el 19 de enero de 1848 en Dawley, Shropshire, Inglaterra. Desde muy temprana edad demostró el interés por el agua y, gracias la escasa distancia entre la casa de su familia y el río Severn, aprendió a nadar antes de cumplir siete años.
Antes de continuar con su historia, es importante mencionar que en aquella época no se pensaba a la natación como un deporte o un pasatiempo, sino como una disciplina necesaria para sobrevivir o salvar vidas.
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Un claro ejemplo de lo mencionado es el acto heroico que tuvo Webb con tan solo 12 años, cuando salvó a su hermano Thomas, que estuvo a punto de morir ahogado en un río.
Casualmente, a esa edad, Matthew ingresó a la Marina mercante y tan solo dos años después se embarcó en la primera de muchas travesías náuticas que realizó durante su adolescencia y juventud.
Antes de enfocarse en la natación, trabajó en siete embarcaciones distintas y llegó a obtener el cargo de capitán durante seis meses, en su último viaje, durante enero de 1875.
¿En qué año tomó la decisión de cruzar a nado el Canal de la Mancha?
No hay dudas de que la natación siempre fue parte de la vida de Matthew Webb. Pero, además, también sorprendió al mundo con su capacidad y habilidad para efectuar rescates.
Además de salvarle la vida a su hermano cuando tenía 12 años, en uno de sus viajes por Europa notó que un colega se había caído del barco y no dudó en saltar, en el medio del océano Atlántico, para ayudarlo.
Lamentablemente, la persona accidentada nunca se encontró. Pero este accionar de Webb le permitió ganar una recompensa económica y un lugar entre los medios de comunicación británicos.
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Y así fue como, tras estas experiencias laborales y deportivas, el joven europeo leyó un reporte sobre J.B Johnson, recordado como un nadador que intentó cruzar el Canal de la Mancha a nado, y decidió empezar un entrenamiento puntual para lograr el desafío mencionado.
Luego de dos años de preparación, Webb saltó al canal el 12 de agosto de 1875 y avanzó con fuerza. Pero, debido a las condiciones climáticas, tuvo que abandonar antes de completar el viaje.
Finalmente, doce días después, volvió al Canal de la Mancha y, tras 21 horas y 40 minutos a pura brazada, se convirtió en la primera persona de la historia en lograr atravesar sus 39 kilómetros de ancho a nado, sin ayuda de artificial.
