La central hidroeléctrica de Itaipú se encuentra en la frontera entre Paraguay y Brasil, en las ciudades de Hernandarias y Foz do Iguaçu respectivamente. Se trata de la segunda más grande del mundo. Su origen es muy particular: se la pensó evitar un conflicto por los límites entre ambos países sudamericanos.
Luego del a Guerra de la Triple Alianza, se firmó un tratado de paz entre los dos, donde se establecía que los territorios comprendidos entre el río Blanco y el río Apa ya no pertenecería a la República de Paraguay, sino a Brasil. Aún así, la demarcación de los límites no estaba clara. Hasta 1874, una Comisión Mixta Demarcadora de Límites trabajó en ello, aunque no pudo concretar su tarea.
Como los límites de Paraguay estaban establecidos pero no demarcados, el ejército brasilero ocupó la zona. Ante un posible conflicto armado, Estados Unidos actuó como mediador. Como resultado, se firmó el Acta de Iguazú, a través de la que se creaba una nueva comisión mixta paraguayo-brasileña para estudiar el posible aprovechamiento hidroeléctrico del río Paraná y que prometía precio justo y adquisición preferencial de la energía eléctrica producida. Finalmente, se estableció la construcción con la firma del Tratado de Itaipú.
La construcción de Itaipú
En enero de 1975 comenzaron las obras para su construcción, que sería administrada por la Entidad Binacional Itaipú, creada un año antes. Los materiales que se usaron fueron:
- Hormigón
- Piedra
- Tierra
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La represa, de 7.919 metros de largo, cuenta con 20 unidades generadoras, 10 en la frecuencia de la red eléctrica de Paraguay, que es 50 hertz, y y 10 en la de Brasil que es 60 hertz. Todas ellas tienen una tensión nominal de 18 kilovoltios.
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La represa produce 90 millones de megavatios-hora (MWh) por año. Con el aumento de la capacidad luego de obras realizadas en 2007 y en condiciones favorables del río Paraná, ese número puede aumentar.
