La Catedral de Milán, también conocida como Duomo di Milano, es uno de los templos más imponentes del mundo y un símbolo inconfundible de la ciudad italiana. Su construcción comenzó en 1386 por orden de Gian Galeazzo Visconti, entonces señor de Milán, quien buscaba consolidar el poder religioso y político de la región.
Desde sus inicios, la intención fue levantar una catedral diferente a todo lo conocido. Por eso, en lugar del estilo románico típico del norte de Italia, se eligió una arquitectura gótica, muy popular en el norte de Europa. El resultado fue una obra colosal que, por su complejidad, tardó más de cinco siglos en completarse. Recién en 1965 se colocaron las últimas esculturas decorativas que marcaron su finalización formal.
Hoy sigue siendo el centro religioso más importante de la ciudad y una de las atracciones turísticas más visitadas del continente europeo. Además, sigue funcionando como sede del arzobispado y lugar de celebraciones litúrgicas.
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Catedral de Milán: arquitectura, datos clave y curiosidades
Esta catedral es una obra monumental que impresiona desde cualquier ángulo. Su fachada, llena de detalles, y sus interiores, majestuosos, combinan siglos de trabajo artesanal. A continuación, te contamos algunos datos que la hacen aún más especial:
- Estilo: gótico internacional con elementos renacentistas y neoclásicos;
- Dimensiones: mide 157 metros de largo y puede albergar a más de 40.000 personas en su interior;
- Esculturas: posee alrededor de 3.400 estatuas, incluyendo gárgolas, santos, animales mitológicos y figuras bíblicas;
- La Madonnina: en la cima del edificio se encuentra una estatua de cobre dorado de la Virgen María, colocada en 1774, que se convirtió en el emblema de la ciudad;
- Terrazas visitables: se puede subir al techo para apreciar de cerca las agujas y disfrutar de una vista panorámica de Milán.
El Duomo también es famoso por sus vitrales, sus criptas subterráneas y su órgano, uno de los más grandes de Europa. Su importancia no solo reside en su aspecto religioso, sino también en su valor cultural y artístico.
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