Muchísimas cosas caracterizan a Argentina. Una de ellas, por ejemplo, es el tango. Otra es el infinito listado de expresiones autóctonas que llevamos a donde sea que vayamos. ¿Qué pasa si mezclamos las dos? Obtenemos, como resultado, una frase icónica: "ser Gardel".
Ya pasaron 89 años de su trágica muerte y, sin embargo, el legado gardeliano sigue vivito y coleando en el Río de la Plata. Billiken te cuenta más sobre la reconocida expresión que lleva en su centro al famoso compositor y cantante argentino.
Entender quién fue Gardel para llegar a "ser Gardel"
Carlos Gardel fue una de las piedras fundacionales de la argentinidad. Nació el 11 de diciembre de 1890 en la ciudad francesa de Toulouse -es lo que se cree: su lugar de nacimiento sigue estando sujeto a discusión hoy en día- y llegó a la Argentina a los tres años.
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Después, de 1915 hasta su muerte, arrasó en el mundo entero. En Estados Unidos filmó 11 películas mientras que a través del Océano Pacífico, en París, vendió 110 mil discos en menos de un año. Además produjo una cantidad impresionante de piezas musicales, ¡unos 800 temas a lo largo de su vida!
Esto fue Gardel: alguien muy destacado en su tarea. Entenderlo nos va a permitir entender por qué forma parte de una de las expresiones más usadas en Argentina.
¿Qué significa "ser Gardel"?
En la larga lista de frases autóctonas argentinas, esta expresión da a entender la magnitud de un triunfo personal como ninguna otra.
Decir que una persona "es Gardel" implica resaltar que es un ídolo en determinado ámbito. "Sos Gardel" cuando triunfás en cualquier sentido o contás con una ventaja destacable respecto a los demás.
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Por ejemplo, si en plena ola de calor tenés patio con pileta, sos Gardel. Si lograste resolver un problema matemático que jamás nadie pudo resolver, también. Y así podemos seguir infinitamente: obtener cualquier tipo de triunfo le da este título a una persona.
Así, el tanguero vive no solo en su legado musical sino también en su legado lingüístico, habiéndose transformado su apellido en un amado adjetivo.