En tiempos de guerra, cuando el país aún se encontraba en plena lucha por su organización política, floreció un amor que desafió normas, convenciones y peligros: el de el gobernador de Entre Ríos, Francisco “Pancho” Ramírez y La Delfina, una mujer que lo acompañó hasta el final, incluso en el campo de batalla.
Aunque muchas versiones circulan sobre el origen de La Delfina, se cree que fue una cautiva brasileña o paraguaya rescatada por Ramírez. Desde entonces, se volvió su inseparable compañera. Vestía uniforme militar, sabía montar a caballo y, según relatan las crónicas, empuñaba sable y pistola como uno más del ejército. Esta imagen desafiante para la época la convirtió en una figura legendaria dentro de la historia argentina.
Ramírez y La Delfina: una historia de amor y guerra
Francisco Ramírez fue uno de los caudillos más influyentes del litoral argentino durante las primeras décadas del siglo XIX. Defensor del federalismo y figura clave en la historia de Entre Ríos, enfrentó a líderes poderosos como Estanislao López y José de San Martín. A su lado, siempre estuvo La Delfina, no solo como pareja sentimental sino como aliada política y militar.
En 1821, Ramírez emprendió una peligrosa campaña para liberar a Delfina, que había sido capturada por fuerzas santafesinas. Durante esta misión, fue emboscado y asesinado el 10 de julio de ese año. Su cuerpo fue decapitado y su cabeza exhibida públicamente. La Delfina logró escapar y, según algunas versiones, vivió muchos años más, ocultando su identidad.
Su legado romántico y trágico
La historia de Ramírez y La Delfina ha sido contada en libros, canciones populares y obras de teatro. Su intensidad y dramatismo la convirtieron en una de las leyendas de amor más recordadas del país. Existen relatos que sostienen que La Delfina murió en la pobreza y el anonimato, aunque también se dice que fundó una escuela rural y fue enterrada con su uniforme de campaña.
Tres datos para recordar esta historia:
- Francisco Ramírez nació en 1786 y murió en 1821.
- La Delfina combatió junto a él vestida de militar, algo inusual para su época.
- En Entre Ríos existen calles y escuelas con sus nombres en homenaje a ambos.
Aunque muchos aspectos de su vida siguen envueltos en misterio, su historia de amor trascendió el tiempo y aún hoy emociona a quienes la descubren.
