En el partido bonaerense de San Vicente, a unos 50 kilómetros de la Ciudad de Buenos Aires, se encuentra un sitio histórico poco conocido por fuera del mundo político, pero muy relevante para la memoria colectiva de la Argentina: la Quinta San Vicente. Esta propiedad fue una de las residencias de descanso de Juan Domingo Perón. Se transformó en un museo que preserva parte importante de la historia del peronismo.
El terreno tiene una extensión de unas 19 hectáreas, con árboles centenarios, una casona de estilo colonial y un lago artificial. Allí, Perón pasó temporadas junto a Eva Duarte de Perón, más conocida como Evita, y fue también en ese lugar donde descansaron sus restos por un tiempo, tras ser trasladados desde el Cementerio de Chacarita.
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Tres datos clave sobre la Quinta San Vicente
- Fue adquirida por Juan Domingo Perón en 1947 como casa de descanso.
- Funciona como Museo Histórico 17 de Octubre desde el año 2006.
- Alberga el mausoleo de Perón, donde descansan sus restos.
De casa de descanso a museo histórico
La Quinta San Vicente fue adquirida por Perón en 1947, en el contexto de su primera presidencia. El objetivo era tener un espacio tranquilo, rodeado de naturaleza, donde pudiera distenderse de las responsabilidades del poder. Evita, por su parte, también solía refugiarse allí para escribir o recibir visitas lejos del centro porteño.
Con el paso del tiempo, y tras el fallecimiento de ambos, el predio pasó por varias etapas hasta que, en 2006, se convirtió en el Museo Histórico 17 de Octubre, en alusión a la emblemática jornada en la que miles de trabajadores marcharon para pedir la liberación de Perón, en 1945.
Hoy, el museo exhibe objetos personales, fotografías, muebles originales, vestimenta, documentos históricos y hasta los autos que pertenecieron a la pareja presidencial. Es un sitio de gran valor para comprender no solo la vida de Perón y Evita, sino también la cultura política del siglo XX en Argentina.
Quinta San Vicente: un sitio cargado de simbolismo
Además de ser una residencia y museo, la Quinta San Vicente tiene un fuerte valor simbólico. Allí se encuentra el mausoleo donde descansan los restos de Perón, en una cripta de mármol negro, custodiada por esculturas de bronce. El traslado de sus restos al lugar, en 2006, fue un evento de gran repercusión, con una ceremonia pública que contó con la presencia de dirigentes y simpatizantes de todo el país.
Este sitio forma parte del patrimonio histórico nacional y es administrado por la provincia de Buenos Aires. Se puede visitar y recorrer sus jardines, el museo y participar de actividades culturales que se organizan de manera regular.
