El cuerpo humano está compuesto por 206 huesos. Algunos son grandes como el fémur o el húmero, y otros son de menor tamaño pero no por eso menos importantes o útiles. Con apenas 3 milímetros de longitud, el estribo es el hueso más pequeño que tenemos las personas.
Este hueso se encuentra en el oido, junto con otros dos ejemplares diminutos el yunque y el martillo,
Además de ser el hueso más pequeño del cuerpo humano, también es el más vulnerable. Esto se debe a que su diminuto tamaño y ubicación, un pequeño golpe en la cabeza puede llegar a lastimarlo al mundo de causar su fractura. En caso de que eso suceda, la persona sufriría una considerable pérdida de la audición.
A su vez, el estribo, que también es el hueso más afilado, recibe su nombre dado su parecido con los estribos de las sillas de montar. Esas piezas de metal en donde los jinetes apoyan sus pies mientras montan a caballo.
¿Cómo funciona el oido?
El estribo se encuentra unido al yunque y su rol a la hora de permitir la audición es fundamental. En primer lugar, cuando las ondas sonoras hacen vibrar el tímpano, éste replica dichas ondas y se las envía al próximo hueso mas cercano que es el martillo.
A su vez, el martillo transmite esas vibraciones al yunque, y este hace lo mismo con el estribo. Luego, este pequeño hueso se encarga de enviarlo a la ventana oval. Allí estas ondas llegarán a la parte interna del oido y viajarán por los nervios hacia el cerebro, donde finalmente se decodificará el sonido.
¿Qué pasa cuando no funciona bien el estribo?
Los motivos que pueden desencadenar que el estribo no funcione como corresponde son muchos. Los más habituales están relacionados con condiciones médicas como otitis, y el uso indebido de hisopos o algún otro objeto para limpiar los oídos también pueden causar un gran daño si no se los utiliza con cuidado.
De ocurrir algún inconveniente, las ondas sonoras no podrían llegar correctamente al oido y con el tiempo esta problemática podría profundizarse al punto de culminar con la pérdida absoluta del sentido. Las principales consecuencias que devienen de una falla en esta parte del cuerpo son: vértigos, mareos y tinnitus.