El protector solar es de esos inventos que parecen haber existido desde siempre. Tiene sentido; es difícil imaginarnos una época en la que el humano no contaba con ningún tipo de protección para cuidarse de los rayos del sol.
Sin embargo, esta crema protectora no llega ni siquiera a los 100 años de existencia. Billiken te cuenta el curioso contexto en el que surgió y cómo pasó a formar parte de nuestro día a día.
Un patrón que se repite
Protegerse del sol no se limita a nuestra especie. Si nos detenemos a pensar más allá de nosotros, muchos otros animales se cubren el cuerpo de distintas formas para protegerse de los rayos del sol.
Pensemos, por ejemplo, en los elefantes. Tienen el instinto innato de cubrirse con barro para cuidar su piel, muy correosa y susceptible a las quemaduras. Los hipopótamos mantienen el noventa por ciento de su cuerpo bajo el agua durante el día para protegerse. El patrón se repite, las pieles se cuidan.
¿Cuál es el origen del primer protector solar?
Es difícil determinar la primera vez que el humano usó una protección contra los rayos del sol. Por convención y costumbre los humanos, al igual que el resto de los seres vivos, buscamos siempre protegernos del dolor. El sol también quemaba nuestra piel miles de años atrás; que encontrásemos algo para protegernos era sólo cuestión de tiempo.
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Algunas fuentes dicen que el invento se adjudica a los griegos del año 400 a.C. Cuando entrenaban para los Juegos Olímpicos, creaban una mezcla de arena y aceite para pasarse por todo el cuerpo y, así, evitar quemaduras.
Otros precedentes importantes a tener en cuenta para entender el invento nos los traen dos exploradores transatlánticos. A finales del siglo XIV, Cristóbal Colón escribió en sus diarios que vio a los nativos "pintarse el cuerpo de colores". Incluso más tarde, en el siglo XIX, Charles Darwin escribió que había visto "gente pintada" durante sus viajes en el HMS Beagle.
¿Cuándo se creó el primer protector solar?
Si bien las observaciones de Colón o Darwin y las costumbres griegas aportaron precedentes importantísimos para la creación del protector solar, no podemos asegurar fácticamente que alguna de esas instancias haya inventado esta crema tal como la conocemos hoy.
Para hablar oficialmente de su invención tenemos que viajar a 1938, año en el cual un doctor suizo llamado Franz Greiter se interesó en crear un producto que protegiera la piel de la radiación solar.
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¿La motivación del suizo? En aquél momento, su piel se encontraba completamente quemada después de una larga jornada de escalada.
Así creó lo que él llamó "crema glaciar", la primera crema de protección solar del mundo. Pudo ser comercializada bajo el nombre de Gletscher Crème y contaba con un FPS de tan solo 2 —muy por debajo de los FPS actuales que van desde los 15 a los 50+—.
