Aunque resulte imposible imaginar la estructura de una “silla de ruedas” para peces, el diseñador de moda Henry Kim, oriundo de Corea del Sur, inventó el pequeño artefacto para extender la esperanza de vida de sus mascotas.
Es decir, debido a un trastorno en la vejiga natatoria, algunos de sus peces perdían su habilidad para nadar en la pecera y se hundían hasta el fondo.
Y, aunque su “silla de ruedas” no mejora su salud, sí le garantiza mayor comodidad para desplazarse y más días de vida.
¿Cómo construyó Henry Kim la “silla de ruedas” para peces?
Luego de buscar información en Internet, observar tutoriales en YouTube y hacer distintos bocetos, el diseñador de moda de 32 años logró crear la primera “silla de ruedas” para peces que tienen trastorno de la vejiga natatoria.
Una vez que completó la primera fase de su trabajo, tomó a un ejemplar de pez dorado, que vive en una pecera de Seúl, junto a otros 20 animales coloridos, para colocarle su invento.
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Finalmente, tras un largo periodo de análisis, Kim llegó a la conclusión que la “silla de ruedas” le permitió:
- Facilitar su nado y evitar que el animal permanezca inmóvil sobre la línea de la superficie o en el fondo de la pecera hasta su fallecimiento.
- Extender su esperanza de vida hasta cinco meses (sin el adaptador, puede morir en pocos días).
¿Qué es el trastorno de la vejiga natatoria?
El trastorno de la vejiga natatoria es muy común en peces de todos los tamaños y se describe como una dolencia que aparece por la mala alimentación o la permanencia del animal en aguas sucias.
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Es decir, si un pez come en exceso o solo ingiere comida de mala calidad, tiene más posibilidades de enfermarse. Si esto sucede, su cuerpo tendrá más aire del necesario, no podrá controlar su flotabilidad y todo su organismo fallará.
