La Patagonia Argentina está repleta de espejos de agua remotos, ubicados en sitios prácticamente inaccesibles, distantes de cualquier tipo de urbanización, como sucede con la fantástica Laguna Fea.
Emplazada en el extremo norte de la provincia de Neuquén, este destino turístico, que solo puede ser explorado a caballo, en moto o con camionetas 4x4, se presenta como un lugar en donde reina la naturaleza y la tranquilidad.
Por lo tanto, a pesar de que se organizan distintas expediciones todos los años, la Laguna Fea aún se mantiene como uno de los espejos de agua de la Patagonia más bellos y difíciles de conocer.
También te puede interesar > Laguna de Mar chiquita en Córdoba, uno de los humedales más grandes del mundo
¿En dónde se encuentra la Laguna Fea?
La Laguna Fea es, junto a la Laguna Negra, el paisaje más al norte de la provincia de Neuquén, ya que a pocos kilómetros de la orilla se encuentra la línea que marca el comienzo de Mendoza.
Además, este espejo de agua también está sobre el límite internacional entre Argentina y Chile, en el corazón de la Cordillera de los Andes, a cientos de kilómetros del pueblo más cercano.
Por lo tanto, debido a la ausencia de rutas o caminos rurales en la zona, quienes se adentren en la aventura de visitar la Laguna Fea, tendrán que viajar con mucha precaución ya que es uno de los puntos más remotos del país.
De todas formas, los afortunados que concretan la dura travesía por la montaña, tienen como recompensa una laguna enorme, caracterizada por su agua de color azul intenso.
¿Cómo se puede visitar la Laguna Fea?
Debido a las dificultades del camino, no es recomendable intentar visitar la Laguna Fea en solitario. La mejor opción es trasladarse en grupos, bien abastecidos y conformados por conductores con mucha experiencia.
Entonces, una vez que se hayan trazado todos los planes, es necesario conducir por la Ruta Nacional 40 hasta el pueblo de Barrancas y tomar el desvío rumbo a la Ruta Provincial 53.
Al ingresar en este camino, hay que viajar durante horas, imitando el curso del Río Barrancas que separa Neuquén y Mendoza, hasta llegar al paraje de Coyuco-Cochico.
Acto seguido, la travesía continúa por la Ruta 53, que luego se transforma en la Ruta Provincial 54, hasta la zona del Cajón de los Nevados, en donde nace un camino prácticamente sin demarcar.
Finalmente, luego de superar pendientes, cruzar ríos y atravesar caminos repletos de piedras, se llegará a la Laguna Fea en donde habrá que acampar, al menos, una noche.
Sucede que la travesía es tan larga que es imposible viajar a la laguna y regresar a los pueblos en menos de 24 horas. Y, debido a los desafíos del camino, no es recomendable transitarlo de noche.
¿Cuáles son las características de este espejo de agua?
A juzgar por las fotos, la Laguna Fea es todo lo contrario al adjetivo que incluye en su nombre. Es decir, se trata de un espejo de agua natural y muy azulado, enmarcado por grandes montañas y un terreno prácticamente desértico.
Por lo tanto, quienes deseen planear un viaje para conocerla, antes de iniciar la travesía deben tener en cuenta que esta laguna:
- Tiene un formato alargado, de 10 kilómetros de largo por dos kilómetros de ancho.
- Alcanza una profundidad máxima estimada de 250 metros.
- Se ubica a 2.500 metros sobre el nivel del mar.
- Carece de una conexión hidráulica directa con el río Barrancas.
- Desagua de forma subterránea hacia los arroyos Curamilio y Puente de Tierra a través de manantiales.
- Cubre una superficie de 15 kilómetros cuadrados.
- Está sometida a intensos trabajos de medición en tiempo real, ya que ha presentado numerosos desbordes en el pasado.
También te puede interesar > Laguna de Vilama: un paraíso escondido en el corazón de la Cordillera de los Andes
¿Qué otras lagunas hay en la región?
Quienes viajen con tiempo y provisiones de sobra, además de conocer la Laguna Fea también podrán hacer un pequeño desvío para trasladarse hasta la Laguna Negra.
Este espejo de agua, que es más pequeño que el descrito anteriormente, cuenta con la particularidad que pertenece a dos provincias. Es decir, por el centro de la laguna pasa la línea imaginaria que divide Neuquén y Mendoza.
Por lo tanto, al recorrer la orilla Oeste de la Laguna Negra se estará en suelo neuquino, mientras que al pasear y explorar la orilla Este, se pisará un terreno mendocino.
Finalmente, a pocos kilómetros de ambas lagunas hay otros cuatro espejos de agua. Sin embargo, para visitarlos hay que completar un trámite, ya que se encuentran en Chile. Estos se identifican como:
- Laguna del Maule.
- Laguna Cari Launa.
- Laguna Sin Puerto.
- Laguna Nieblas.