Cada cuatro años, la colección de figuritas se vuelve realmente popular. La fiebre por completar los álbumes de figuritas del Mundial aumenta vigorosamente su demanda y llega hasta dejar completamente sin stock a los kioscos argentinos. ¿Cómo se originó esta afición, tan arraigada hace ya varios años en nuestra sociedad?
El comienzo de esta historia se remonta a la ciudad italiana de Módena, donde tres hermanos oriundos de un pueblo cercano consiguieron la licencia para operar un pequeño kiosco de diarios. Se trata, nada más ni nada menos, de los hermanos Panini: dueños de Editorial Panini, la cual en la actualidad sigue liderando a nivel mundial el sector cromos.
Giuseppe, Benito y Umberto Panini manejaban tan bien el negocio del kiosco que pronto invirtieron sus ganancias en una agencia de distribución.
La inspiración de la creación fue por pura casualidad: cuentan que uno de ellos se cruzó con una colección de tarjetas de plantas y flores, las cuales venían como promoción con una revista. Estas tarjetas coleccionables eran muy populares y se vendían cada vez con mayor frecuencia.
Al contarle el suceso a sus hermanos, el trío decidió dividirlas en paquetes de dos unidades y venderlas por separado fuera de la colección. Tras el éxito de dicha idea, comenzó a forjarse la idea de un proyecto más concreto.
Cómo nació Panini, el grupo de líder de figuritas
El primer paso se dio en 1961 cuando alquilaron un taller sobre Via Castelmaraldo. Compraron los derechos de algunas de las estrellas del fútbol italiano con la idea de imprimir tarjetas con sus imágenes. Las primeras figuritas eran más pequeñas que las que conocemos ahora: tenían el tamaño de estampitas.
Tres años después compraron una planta impresora y lograron lanzar el primer álbum con el objetivo de que los compradores pudieran pegarlas en algún lugar. El autoadhesivo llegó algunos años después.
El éxito del proyecto llegó en 1970, cuando los Panini se asociaron oficialmente con la FIFA, la Federación Internacional de Fútbol, y fueron los encargados de la creación del álbum oficial del Mundial de México 1970.
A pesar de que el fútbol, especialmente en época mundialista, se convirtió en el fuerte de la compañía, los Panini se rebuscaron una forma de mantenerse vigentes permanentemente. Durante todo el año comenzaron a venderse álbumes de superhéroes, novelas, series, entre otros.
Al día de hoy, el grupo Panini sigue siendo el líder en cuestión de figuritas. En 2014 el grupo registró ventas por 758 millones de euros durante el Mundial de Brasil y más de 1000 millones de euros en el de Rusia.
