Este animal, que es conocido como “Lithobates sylvaticus” por su nombre científico, es capaz de resistir temperaturas de hasta -20°C y permanecer congelado durante un periodo máximo de 218 días.
La naturaleza es sorprendente porque, entre todos los animales que tienen características cotidianas, hay especies como la rana de madera, por ejemplo, que desarrolla habilidades únicas.
Esta animal, que tiene una amplia distribución en América del Norte, es considerado uno de los más resistentes del mundo debido a su enorme tolerancia al frío.
Pero lo más llamativo es que no solo es capaz de soportar temperaturas de hasta -20°C, sino que también lleva sus condiciones corporales al extremo y se congela durante seis meses para sobrevivir.
Aunque la capacidad de sobrevivir a extensos períodos de congelamiento es una propiedad de la rana de madera que aún se estudia con mucha intensidad, expertos han logrado obtener algunas conclusiones al respecto.
Por lo tanto, hasta el momento se sabe que este pequeño animal puede permanecer hasta 218 días congelado gracias a un proceso de crioprotección, mediante el cual evita que sus células se mueran.
En otras palabras, cuando llega la parte más cruda del invierno, la rana de madera genera altos niveles de glucosa y embala sus células con este tipo de azúcar para estabilizarlas.
Entonces, a pesar de que su cuerpo queda inmóvil y sufre el congelamiento de hasta el 70% del agua corporal, sus células se mantienen vivas gracias a la glucosa, hasta que la temperatura ambiental aumente de forma considerable.
No hay dudas de que la característica más llamativa de la rana de madera es la capacidad de resistir amplios procesos de congelación corporal durante extensos periodos.
Pero, además de estudiar esta habilidad, los expertos también han centrado sus análisis en todas las propiedades de este animal. Y es por eso que, en la actualidad, se sabe que este tipo de rana:
La rana de madera es un animal que habita los bosques y humedales ubicados desde el norte de Georgia (Estados Unidos) y el noreste de Canadá hasta Alaska y el sur de la Columbia Británica (Canadá).
Por lo tanto, quienes recorren esas tierras pueden encontrar un ejemplar en libertad con mucha facilidad, ya que esta especie tiene la costumbre de cambiar de humedal durante cada periodo de reproducción.
Es decir, este tipo de rana vive en el bosque y acude al humedal más cercano para reproducirse. Pero, en el caso de los ejemplares que nacen en ese humedal o de aquellos que se reproducen por segunda vez, se desplazan a otro sitio que tenga las mismas características.
Finalmente, también es importante resaltar que la rana de madera no solo se traslada de un lugar a otro para reproducirse, sino que también lo hace cuando cambian las estaciones del año.
Durante el verano, este animal suele ser visto en pantanos boscosos, barrancos o ciénagas. Pero, cuando llega el invierno y debe congelarse, migra a tierras altas que están repletas de bosques.
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