¿Sabés qué es el queísmo?

El queísmo es una forma de uso erróneo del lenguaje que consiste en la supresión de la preposición “de” delante de la conjunción “que” cuando es necesario que esté en la oración. Por ejemplo, es incorrecto decir: “Estoy seguro que me llamarán”. La forma correcta es: “Estoy seguro de que me llamarán”. 

¿En qué casos debe aparecer la preposición “de” antes de la conjunción “que”?

La preposición “de” debe escribirse delante de la conjunción “que” cuando se usan verbos pronominales, es decir, verbos que necesitan ir acompañados de una determinada preposición para completar su significado (son aquellos que empiezan o terminan en “me”, “te”, “se”, “nos” y “os”). Por ejemplo, levantarse, encontrarse y sorprenderse.

Tampoco se debe omitir la preposición “de” delante de la conjunción “que” frente a verbos no pronominales como “convencer de” o  “insistir en”. También hay ciertas locuciones verbales, ciertos sustantivos y ciertos adjetivos que siempre llevan un complemento preposicional.

Ejemplos de uso frecuente del queísmo

En la vida cotidiana suele producirse el queísmo. A continuación, una serie de ejemplos junto con las formas correctas del habla.

• Me alegro que haya renunciado ese profesor (queísmo)
• Me alegro de que haya renunciado ese profesor (forma correcta)

• Mi marido se olvidó que era nuestro aniversario (queísmo)
• Mi marido se olvidó de que era nuestro aniversario (forma correcta)

• Casi nunca me acuerdo que hay que desactivar la alarma (queísmo)
• Casi nunca me acuerdo de que hay que desactivar la alarma (forma correcta)

• Lo convencieron que saliera de vacaciones en diciembre (queísmo)
• Lo convencieron de que saliera de vacaciones en diciembre (forma correcta)

• Nunca me arrepentí que nos hayamos conocido (queísmo)
• Nunca me arrepentí de que nos hayamos conocido (forma correcta)

• Tratamos que el cliente salga satisfecho de nuestro local (queísmo)
• Tratamos de que el cliente salga satisfecho de nuestro local (forma correcta)

• Teníamos muchísimas ganas que saliera el sol (queísmo)
• Teníamos muchísimas ganas de que saliera el sol (forma correcta)

• No me daba cuenta que estabas ahí parado, esperándome (queísmo)
• No me daba cuenta de que estabas ahí parado, esperándome (forma correcta)

• Estábamos seguros que ganaríamos (queísmo)
• Estábamos seguros de que ganaríamos (forma correcta)

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