Nuestro cuerpo reacciona a diversas situaciones con estrés, activando un sistema de alerta que puede afectar nuestra salud. Sin embargo, estudios determinaron que la vitamina C puede ser una aliada en esta lucha.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define el estrés como cualquier tipo de cambio que provoca agotamiento físico, emocional o psicológico. Según la institución, se trata de una respuesta natural del cuerpo humano ante situaciones que requieren un accionar rápido.
¿La vitamina C puede reducir el estrés?
La vitamina C es conocida por sus múltiples beneficios para la salud, y uno de ellos es su capacidad para reducir el estrés. Esto sucede ya que la vitamina C ayuda a disminuir los niveles de cortisol en la sangre, esa hormona que se libera cuando estamos estresados.
Además, favorece la formación de mielina en las neuronas, lo que mejora la comunicación entre las células cerebrales y optimiza procesos clave para el humano, como la memoria.
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La vitamina C es un nutriente esencial que puede ayudarnos a reducir el estrés, mejorar nuestra función cognitiva y fortalecer nuestro sistema inmunológico. Algunos de los alimentos ricos en vitamina C son:
- Naranjas y otros frutos cítricos.
- Frutillas.
- Kiwis.
- Tomates.
- Espinaca.
- Papas.
- Morrones verdes y rojos.
Es importante recordar que la información sobre los beneficios de la vitamina C es un área de investigación activa, y algunos de los beneficios mencionados siguen construyendo su respaldo científico definitivo. Siempre es recomendable consultar a un profesional de la salud antes de realizar cambios significativos en tu dieta o tomar suplementos.
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Además, es fundamental aclarar que, si bien la vitamina C es beneficiosa, no es una cura milagrosa. El estrés es un problema complejo que puede requerir diferentes estrategias, como cambios en el estilo de vida o terapia, entre otras.