Streaming y cine argentino hoy van de la mano. La industria audiovisual nacional tiene más de cien años de historia y es considerada una de las más influyentes de América Latina. Desde películas que marcaron época hasta producciones recientes premiadas en festivales, gran parte de ese patrimonio audiovisual está hoy disponible en plataformas de streaming. Así, los espectadores pueden acceder a clásicos nacionales desde cualquier parte del mundo.
CINE.AR, el catálogo más completo
Impulsada por el INCAA, CINE.AR Play es la vidriera digital más importante para el cine argentino. Con acceso gratuito y solo un registro previo, ofrece películas como La Patagonia Rebelde (1974), La historia oficial (1985) —ganadora del Óscar— y Pizza, birra, faso (1998). Su catálogo incluye tanto producciones históricas como estrenos recientes, y se renueva cada semana.
Streaming clásicos argentinos en plataformas internacionales
Además de las opciones locales, los servicios globales incorporaron títulos nacionales a sus catálogos.
- Netflix: ofrece películas como Nueve reinas (2000), El secreto de sus ojos (2009) y Crónica de una fuga (2006).
- HBO Max: amplió su lista con obras de Israel Adrián Caetano, como El bonaerense (2002) y Un oso rojo (2002).
- Disney+: apuesta a series argentinas como Santa Evita (2022) y Terapia Alternativa (2021), que acercan nuestras historias a públicos internacionales.
- MUBI: se centra en cine de autor y clásicos restaurados, con gran presencia de producciones argentinas.
Otras plataformas para descubrir joyas del cine nacional

Existen también espacios alternativos que preservan y difunden películas argentinas:
- Cinemargentino.com: videoteca gratuita con más de 500 títulos.
- MALBA Cine: ofrece ciclos virtuales con clásicos del cine nacional.
- ARiDA: plataforma del Instituto Universitario Patagónico de las Artes con películas regionales.
Estos sitios permiten acceder a producciones que, de otra forma, serían muy difíciles de encontrar.
Un patrimonio cultural en pantalla
Gracias al streaming, los clásicos argentinos no solo se conservan, sino que también llegan a nuevas generaciones. La posibilidad de ver una película premiada de los años 80 en la misma plataforma que una serie estrenada en 2022 demuestra la vigencia de nuestra industria audiovisual.
