Unos llevan hilos y un mando de madera, los otros no.
¿Quién no vio alguna vez una obra con títeres? Esas en las que figuras artesanales, creadas con materiales de todo tipo, parecen tener vida. Animadas con el ímpetu de un artista, cada una interpreta a un personaje que puede entretener tanto a niños como a adultos.
El escenario suele ser pequeño, apto para que al titiritero le quede todo a mano, y puede estar decorado tanto como no. En muchos casos, los títeres suelen confundirse con las marionetas.
La comparación tiene sentido: ambas son figuras que se manipulan de una u otra forma para dar vida a diferentes personajes en obras de teatro. Sin embargo, hay algo principal que las diferencia.
Los títeres son objetos milenarios. Pueden encontrarse en culturas muy distintas a lo largo del tiempo, ya sea que estén fabricados con cuero y huesos animales, madera, tela de algodón y, en el último tiempo, plástico o pape maché.
Podría decirse que primero aparecieron estas figuras, y luego las marionetas. ¿Cuál es la diferencia principal entre ambas? Los títeres se manejan directamente con la mano, ya sea a través de un guante o una varilla. De hecho, la propia mano puede encarnar al personaje si se trata de una media, por ejemplo.
Las marionetas, por otro lado, se manejan desde arriba, con hilos que están unidos a las extremidades del cuerpo de la figura. Esos hilos están sujetos a un mando de madera, que es lo que permite al artista mover la figura con facilidad, sin ser visto.
En sí, todo títere es una marioneta potencial, ya que alcanza con sumarle los hilos y el mando para que se convierta en ella. Pero sea una o la otra, ambas nos permiten sumergirnos en un mundo ficticio donde todo es un poco distinto.
El arte de los títeres es tan antiguo y está tan extendido en distintas culturas, que es muy difícil determinar un origen preciso. La palabra tiene sus raíces en el español, pero se cree que la práctica pudo haber surgido en Asia.
Más precisamente, en lo que hoy es la India. El títere es bastante anterior al teatro, y en lo que hay más certeza es en el motivo de su aparición: al parecer, estos muñecos formaban parte de las ceremonias y rituales religiosos en sus inicios, ya sea que interpretaran dioses o figuras míticas.
Cada 3 de marzo se celebran y conmemoran fechas que marcaron un antes y un…
Argentina está dentro de los países que más alcohol consume en el mundo. Y, cuando…
En marzo de 2025, el viaje en tren más largo que se puede hacer en…
Los feriados obligatorios son esperados, en la gran mayoría de los casos, por niños, jóvenes…
Que llueva, nieve o granice es algo de esperar. El agua de los océanos se…
Al caminar por las calles de la ciudad alemana de Bad Frankenhausen, entre todos los…