La historia de la humanidad está atravesada por la religión y, dentro de ella, por los textos sagrados que transmiten enseñanzas, valores y normas de vida. Tres de los más influyentes son la Torá, la Biblia y el Corán, escrituras que dieron forma al judaísmo, el cristianismo y el islam. Estos libros, aunque diferentes en contenido y estructura, comparten un origen común: las tradiciones monoteístas del Medio Oriente.
Torá, Biblia, Corán: sus orígenes
La Torá es el texto central del judaísmo y reúne las enseñanzas de Moisés. Se compone de los primeros cinco libros del Antiguo Testamento y, según la tradición, fue escrita alrededor del siglo V a. C.
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La Biblia, por su parte, es la base del cristianismo. Está formada por el Antiguo y el Nuevo Testamento. El primero coincide en gran parte con la Torá, mientras que el segundo narra la vida y las enseñanzas de Jesús de Nazaret y sus apóstoles.
El Corán es el libro sagrado del islam. Según la tradición musulmana, fue revelado a Mahoma entre los años 610 y 632 d. C. Está dividido en capítulos llamados suras y es considerado la palabra literal de Dios.
Similitudes entre los textos religiosos
Pese a sus diferencias, estos tres textos comparten elementos esenciales:
- Los tres transmiten la creencia en un único Dios.
- Incluyen relatos de profetas como Abraham y Moisés.
- Brindan normas éticas y morales que guían la vida de sus creyentes.
Además, en las tres religiones se destaca la importancia de la oración, la justicia social y la vida comunitaria como pilares de la fe.
Diferencias en la Torá, la Biblia y el Corán
Las divergencias aparecen en la interpretación de los hechos y en el papel de figuras centrales. Para el judaísmo, la Torá es la revelación fundamental; para el cristianismo, la Biblia gira en torno a Jesús como hijo de Dios; y para el islam, el Corán representa la última y definitiva palabra divina.
Otra diferencia es la lengua en la que fueron escritos: la Torá en hebreo, la Biblia en hebreo, arameo y griego, y el Corán en árabe. Estas lenguas originales siguen siendo centrales en la práctica religiosa.
Un legado común en la historia
La Torá, la Biblia y el Corán no solo marcan las creencias de millones de personas en todo el mundo, sino que también influyeron en la cultura, el arte y la historia universal. Su estudio permite comprender tanto sus puntos de encuentro como sus particularidades.
