El salto en alto es una prueba de atletismo que tiene por objetivo sobrepasar una barra horizontal, que se llama listón, posicionada a una determinada altura entre dos postes verticales separados por 4 metros. En su versión masculina, forma parte de las pruebas de atletismo de los Juegos Olímpicos desde su primera edición, celebrada en Atenas en 1896. La competencia para las mujeres comenzó en 1928, en Amsterdam.
La técnica adecuada no siempre fue igual. En 1963, Dick Fosbury, un deportista norteamericano, estudiante de la Universidad de Oregón, decidió cambiar las reglas del juego para siempre y desarrollar su propio estilo.
Antes, se salteaba hacia adelante, flexionando las piernas para superar el listón. Fosbury estaba seguro de que existía una forma más sencilla de hacerlo, buscó popularizarla y lo logró.
Salto en alto: la técnica de Fosbury
El deportista planteaba que había que tomar carrera de forma transversal y antes de llegar, girarse y saltar de espaldas. La comunidad deportiva no se lo tomó muy en serio. Eso cambió en 1968, cuando ganó el título universitario nacional de salto de altura usando su técnica y siguió usándola durante las pruebas de clasificación a los Juegos de México 1968, edición en la que la disciplina cambiaría para siempre.
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A sus 21 años, Fosbury ganó la medalla de oro e impuso su técnica. Luego de semejante hazaña, se retiró del deporte, pero quedaría inmortalizado para siempre, ya que estos se conocen hoy como "salto de altura estilo Fosbury".
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El 12 de marzo de 2023, a los 76 años, Dick Fosbury falleció de cáncer, en Salt Lake City, Utah, Estados Unidos.
