Desde que tenía unos 2 o 3 años, Cal, el hijo de Cameron, soñaba con tener un pulpo como mascota. Al ver que la obsesión con la biología marina y este animal en particular no se iba con el pasar de los años, este padre decidió hacer realidad uno de los mayores sueños de su hijo.
A principios de 2024, Cameron se puso en contacto con una tienda de animales local para consultar sobre la viabilidad de comprar un pulpo.
"Me dijeron que no es habitual —cuenta—, que tenés que asegurarte de hacerlo bien y ser responsable al respecto, pero en teoría... se puede hacer". Puso manos a la obra y, después de mucha investigación y contacto con expertos, consiguió el pulpo que habría de llenar el espacio sobrante en la casa y el corazón de Cal.
El arte de construirle la casa a un pulpo
El hábitat necesario para la supervivencia de un pulpo no es el típico tanque de agua salada. La especie requiere componentes adicionales que le garanticen un entorno seguro y adecuado.
Por eso armarle un acuario llevó un largo tiempo, más si le sumamos el proceso de informarse sobre cómo cuidarlo y encontrar una fuente de alimento adecuada. "Nos llevó bastante tiempo —explicaba Cameron—, unos dos meses de preparación para poder recibirlo. Fue mucho trabajo, pero valió la pena".
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Una vez construida la casa, solo quedaba recibir al nuevo integrante de la familia, y obviamente, otorgarle un nombre: "Terrance".
Una sorpresa... o cincuenta
"Terrance era muy interactiva y le encantaba mostrarse, estar con nosotros e involucrarse en nuestras actividades" cuenta la familia. Así que el día que la pulpo se fue a esconder a su cueva y quedó ahí varios días seguidos, se empezaron a preocupar.
Resultó que Terrance estaba embarazada. Lo más loco era que los huevos que poseía ¡estaban fecundados!
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Al cabo de un tiempo la pulpo puso sus huevos: unos 50 en total. El resto de los integrantes de la familia intentaron cuidar a las crías lo más posible, logrando la supervivencia de más de la mitad —una tasa mucho más alta de lo normal para bebés de esta especie—. Todas ellas permanecieron con Cameron y su hijo Cal hasta que estuvieron listas para irse a hogares más apropiados.