Tal como lo indican Carla Baredes y Pablo Pineau en “La escuela no fue siempre así” (2008), hay muchos niños y niñas que, pudiendo ir a la escuela, se quedan a estudiar en sus casas. Sus padres creen que la escuela no es un buen lugar para ellos y, por eso, no los dejan ir y les enseñan ellos mismos todo lo que deberían aprender. Este tipo de enseñanza, llamada “Homeschooling”, tiene cada vez más adeptos, sobre todo en Estados Unidos, Canadá, Australia, España y Chile. 

¿En qué consiste la modalidad educativa “Homeschooling”?

La “Homeschooling” o “Educación en el hogar” es el proceso mediante el cual se realiza la formación académica de niños y niñas exclusivamente en el ámbito del hogar familiar, en círculos un poco más amplios o en la propia naturaleza. Su característica principal es que se realiza por fuera de las instituciones educativas, tanto públicas como privadas. 

La educación en casa busca desarrollar una forma de aprendizaje que esté alejada de los paradigmas de la escuela tradicional. En muchos lugares la educación en el hogar es una opción legal para padres y madres que quieren formar a sus hijos en un ambiente de enseñanza diferente al de las escuelas.

Muchas familias optan por esta alternativa por motivos religiosos. Otras lo hacen porque no les gustan las escuelas que hay en sus barrios o para evitar el efecto institucional de la escuela en general, ya que desde la perspectiva de los defensores de la “Homeschooling” el sistema educativo convierte a los individuos en obreros o esclavos inteligentes, en seres útiles para el sistema como mano de obra. También es una alternativa para las familias que viven en zonas rurales aisladas, ya que tienen serias dificultades para trasladarse a una escuela de educación formal.

Existen tres tipos de “Homeschooling”

Una de las modalidades de la “Homeschooling” es la de la educación libre o no formal, que se basa en el principio de que cualquier niño o niña tiene la capacidad de aprender y son ellos mismos los más indicados para descubrir sus potencialidades a través de la naturaleza, el ensayo, el juego y no por el método de la repetición y la memorización que ofrecen las escuelas tradicionales. 

Por otra parte, existe otra modalidad dentro de la “Homeschooling”, que muchos llaman “Educación curricular en el hogar”, que reconoce la estructura curricular existente en las escuelas y colegios como la más adecuada para ser enseñada por los padres y madres y aprendida por los niños. De esta forma, los padres actúan como agentes de educación intermediarios entre la escuela y sus hijos.

Por último, existen formas intermedias de educación en el hogar. Muchas familias adoptan diversos grados de rigidez o flexibilidad en la transmisión de conocimientos y en ocasiones optan por comunicar saberes vinculados a contenidos curriculares mezclados con conocimientos propios de las familias. 

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