Son imprescindibles para enviar una carta y para completar datos personales, pero no son tan antiguos como se cree.
El código postal es un esquema de números y letras que se le asigna a una zona determinada para identificarla con mayor facilidad. Este mecanismo se creó en Ucrania en 1932 y, luego, se expandió por distintas partes del mundo. Sin embargo, en países como Irlanda, este sistema no existe.
En Argentina, los códigos se implementan desde 1958. Actualmente, hay 791 en uso. La última modificación en el sistema se realizó en 1998. Desde entonces, el código se comprende por ocho caracteres: una letra identificatoria de la provincia, un número de cuatro dígitos que representa la ciudad o localidad correspondiente y una combinación de tres letras que indican la manzana donde está situada la vivienda o el local.
Previamente, solo se utilizaban los cuatro números correspondientes a la localidad. En los últimos 24 años, la normativa anterior continúa usándose en los pueblos o lugares que tienen pocos habitantes. En las grandes ciudades, se adoptó el código más largo.
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