A lo largo de su historia, el Club Atlético Vélez Sarsfield fue cuna de grandes futbolistas, entrenadores y dirigentes que dejaron una huella imborrable en el fútbol argentino. Desde el inolvidable Carlos Bianchi hasta el carismático José Luis Chilavert, el Fortín supo construir su identidad en base al talento, la garra y la fidelidad de sus ídolos.
Uno de los máximos referentes del club es Carlos Bianchi, quien no solo fue el goleador histórico de Vélez con 206 tantos en 324 partidos, sino también el director técnico que condujo al equipo a la Copa Libertadores y la Copa Intercontinental en 1994. Su legado es tan fuerte que, en 2024, el club homenajeó su trayectoria nombrando una platea del estadio con su nombre.
Tres ídolos históricos de Vélez:
- Carlos Bianchi: máximo goleador del club con 206 goles.
- José Luis Chilavert: ídolo en el arco y referente internacional.
- Fabián Cubero: jugador con más partidos en la historia de Vélez.
Otro ícono indiscutido es José Luis Chilavert, el arquero paraguayo que jugó en el club entre 1991 y 2000 y se convirtió en uno de los guardametas más recordados del fútbol mundial. Con su fuerte personalidad, goles de tiro libre y atajadas inolvidables, “Chila” fue parte fundamental del Vélez multicampeón de los ‘90.
Ricardo Gareca también ocupa un lugar de privilegio. Como delantero brilló en la cancha, pero fue como entrenador donde dejó una marca imborrable: bajo su conducción, el equipo ganó tres torneos locales entre 2009 y 2012. Su figura siempre está ligada a los valores de compromiso y respeto que defiende la institución.
Otros nombres que dejaron huella en Vélez
Además de las grandes estrellas, Vélez se destacó por forjar referentes que, desde el esfuerzo y la constancia, se ganaron el corazón de los hinchas. Uno de ellos es Fabián Cubero, quien jugó más de 630 partidos con la camiseta del Fortín, convirtiéndose en el jugador con más presencias en la historia del club. Su entrega, polifuncionalidad y liderazgo fueron claves durante más de dos décadas.
Otro nombre emblemático es el de Pedro Larraquy, mediocampista aguerrido que vistió la camiseta entre 1971 y 1984. También es recordado Omar Asad, delantero surgido de las inferiores que brilló en el Vélez campeón del mundo en 1994.
Y claro, no se puede hablar de ídolos del Fortín sin mencionar a José Amalfitani, quien fue presidente del club por más de 30 años. Gracias a su gestión, Vélez se convirtió en una institución modelo del deporte argentino. En su honor, el estadio del club lleva su nombre desde 1968.
Una historia construida por ídolos
La historia de Vélez está repleta de figuras que trascendieron el deporte y se convirtieron en símbolos de esfuerzo, talento y amor por la camiseta. Gracias a ellos, el club de Liniers se consolidó como uno de los grandes del fútbol argentino, no solo por sus títulos, sino por su identidad forjada por verdaderos ídolos.