En el mundo de las cervezas, hay una que se destaca por encima de todas. Se trata de Snake Venom, una bebida elaborada por la cervecería escocesa Brewmeister, que posee el récord por tener el mayor porcentaje de alcohol entre todas las cervezas conocidas: ¡67,5%!
Esta cifra no solo sorprende por su magnitud, sino que también la convierte en una bebida que no se puede consumir de forma habitual. De hecho, el nivel de alcohol de Snake Venom supera ampliamente al de la mayoría de los whiskies, vodkas y otros destilados.
Según información oficial brindada por Brewmeister, esta cerveza fue diseñada especialmente para romper límites. Su proceso de producción incluye una combinación de levaduras especiales, congelación por etapas (técnica conocida como "icing") y una fermentación prolongada que permite alcanzar un volumen alcohólico extremo sin perder del todo el carácter de una cerveza.
Características de la cerveza con más alcohol del mundo y por qué requiere precaución

A pesar de su potencia, Snake Venom no se presenta como una bebida para tomar en grandes cantidades. Su botella, que se vende en unidades individuales con una etiqueta de advertencia, invita a un consumo moderado y responsable. La cervecería incluso aclara que no debe ser tomada como una cerveza común, sino como un licor para degustar en pequeñas porciones.
Mirá También

Cerveza: ¿sabías que en un principio era sólida?
Algunas de sus principales características son:
- Lugar de origen: Keith, Escocia
- Graduación alcohólica: 67.5%
- Elaboración: Levaduras especiales, doble fermentación y congelación por etapas
Además, debido a su altísimo contenido de alcohol, la cerveza no tiene gas (carbonatación), lo que la hace más similar a un licor en textura y sabor. El resultado es una bebida densa, con notas maltosas y un final potente.
Una bebida para coleccionistas y curiosos

Snake Venom no se consigue en supermercados comunes. Su distribución es limitada, su precio es elevado y su público está compuesto, principalmente, por coleccionistas y amantes de cervezas exóticas.
La presentación de esta cerveza también llama la atención: se vende en botellas pequeñas de 275 ml y suele venir acompañada de un vaso exclusivo de la marca. Su etiqueta amarilla y negra advierte de forma explícita sobre los efectos de la bebida.
Si bien no es una cerveza para todos los gustos, su existencia genera interés por sus extremos y por haber llevado la técnica cervecera al límite.