Un estudio realizado por la Universidad de Durham determinó que los bebés pueden oler y saborear desde el útero. La investigación se probó en 100 mujeres de 18 a 40 años que estaban embarazadas de 32 a 36 semanas. 

Durante la prueba experimental, las reacciones de los fetos variaron según el alimento al que eran sometidos. Los especialistas notaron que los bebés que recibían zanahoria "sonreían" mientras que los que recibían col rizada ponían cara de "llanto".

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Hasta el momento, todos los estudios que abarcaban este tema estaban basados en resultados después del nacimiento. Este último, fue el primero que pudo mostrar que estas reacciones también existen antes del parto.