El pozo natural más grande de España se encuentra en Cantabria. Su nombre es Gran Pozo MDTE y mide 435,92 metros de profundidad. Fue descubierto en 2016 por espeleólogos, es decir personas que se ocupan a estudiar cavidades naturales, pertenecientes al Club Cántabro de Exploraciones Subterráneas y al Espeleo Club Ábrigu. Además, se trata del segundo pozo más profundo del mundo.
¿Cómo descubrieron al pozo natural más grande de España?
Estos grupos de exploración se dedicaron a investigar la Zona del Macizco Kárstico de Porracolina, ubicada en el uno de los extremos de la Cordillera Cantábrica. Los investigadores registraron pequeñas cavidades próximas a las simas Torca del Tejón y Torca de la Yusa. La clave estuvo en el dato que compartieron los pastores de la zona. Indicaron que uno de los cavernamientos marcados expulsaba mucho aire durante el invierno.
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Para determinar su profundidad, se tiró una piedra. Este pequeño hecho brinda los datos necesarios para realizar una ecuación que determine la altura. Para hacer la cuenta debe tenerse en cuenta:
- El rozamiento del aire,
- La temperatura,
- La humedad,
- La velocidad del sonido.
Al arrojar la piedra y se contaron entre 10 y 12 segundos hasta escuchar el sonido del impacto de la piedra contra el fondo. Las estimaciones iniciales daban como resultado una profundidad de entre 400 y 500 metros.
Debido a que es un lugar que no estuvo en contacto con el ser humano, este tipo de entornos es propenso a desarrollar microfaunas. Eso permite a los investigadores pensar en la aparición de nuevas especies o especies extintas.
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El pozo no se encuentra abierto al público por ser inaccesible y peligroso a las personas que no tengan conocimientos de espeleología.
