Hace exactamente cincuenta años, un grupo de campesinos de China descubrió lo que hoy conocemos como "Guerreros de terracota". En otras palabras, un tesoro de más de 2.000 figuras a escala real, entre las que se encontraban distintas estatuas humanas y de animales.
Sin embargo, lo que parecía terminarse en ese enorme descubrimiento no quedó ahí. En 2011, se detectaron nueve tumbas cerca del mausoleo donde hoy están en exhibición todos los guerreros. Una de ellas, de más de 16 toneladas, se abrió recién este año y el tesoro que se encontró dentro podría confirmar una leyenda milenaria.
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La leyenda del príncipe que murió joven
Lo que se sabía hasta el momento era que los Guerreros de terracota se construyeron para acompañar a Qin Shi Huang, el primer emperador de China, en "el más allá" luego de su muerte. Pero aún quedaba por conocerse el lugar de descanso del príncipe Gao, hijo mayor del emperador.
Una antigua leyenda sobre el lugar de su entierro decía que Gao había muerto a manos de su hermano menor, Hu Hai, quien lo mató por propia petición de Gao tras la muerte del padre. Hu Hai, que deseaba quedarse con el trono a toda costa –y así lo consiguió–, enterró a su hermano en una tumba con miles de tesoros.
Durante siglos, esa tumba permaneció oculta e incluso se llegó a creer que podía no existir. Pero el descubrimiento de la tumba de 16 toneladas junto a los Guerreros de terracota dio vuelta la historia. Fruto del trabajo arqueológico, se llegó a la conclusión de que allí habría descansado Gao, ya que:
- Se encontraron partes del cráneo y la pierna que, luego de pruebas, se determinaron que eran parte de un cuerpo masculino.
- El cráneo dio indicios de que la persona murió joven –al igual que Gao–.
- Los objetos que estaban junto a él resultaron ser de mucho valor, y estos sólo se encontraban en tumbas de los líderes y guerreros más importantes.
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¿Qué objetos se encontraron en el tesoro?
El hallazgo sorprendió a arqueólogos por varios motivos. El primero, el más inmediato, fue que la tumba no estaba saqueada, como había ocurrido con muchas otras que estuvieron abandonadas por siglos.
El segundo motivo, y el más importante, es la gran cantidad de objetos invaluables que estaban en su interior, entre los que se contaron:
- Armaduras y armas.
- Camellos de oro y plata.
- Miles de monedas de plata y bronce.
- Utensilios de cocina.
- Distintas piedras preciosas.
Aunque el descubrimiento aún no se hizo público, se corrió la voz pronto por la importancia histórica que tiene para la historia de China y, también, de la humanidad.
