Durante la Guerra de las Malvinas, ocurrida en 1982, Argentina recibió apoyo de varias naciones latinoamericanas. Uno de los más sorprendentes fue el de Perú, que envió en secreto 10 cazabombarderos Mirage 5P para reforzar las fuerzas aéreas argentinas. Estos aviones pertenecían a la Fuerza Aérea del Perú (FAP) y despegaron desde la base aérea de Chiclayo, una ciudad del norte del país, donde curiosamente el papa León XIV luego fue obispo.
Los Mirage 5P eran aeronaves de combate supersónicas de gran maniobrabilidad, ideales para misiones de ataque. Su envío representó una operación delicada y silenciosa: los aviones fueron pintados con los colores de la Fuerza Aérea Argentina (FAA) y cruzaron el continente volando de noche, con escalas secretas en Jujuy, Salta, Tucumán y San Luis, hasta llegar a Tandil, donde fueron recibidos por autoridades militares argentinas.
Chiclayo, Malvinas y el papa León XIV: un triángulo inesperado

Es relevante destacar que este hecho histórico representó un acto de solidaridad latinoamericana. La conexión con Chiclayo no solo es estratégica, sino simbólica, al unir espiritualidad, historia militar y geopolítica regional.
Además del papel que tuvo como base de despegue de los aviones peruanos, la ciudad de Chiclayo guarda otro dato curioso: es el lugar donde el actual papa León XIV fue obispo.
Los cazas que cruzaron los Andes para una guerra lejana
Una vez en territorio argentino, los Mirage 5P fueron adaptados con sistemas de armamento compatibles con los usados por la FAA. Aunque no se conoce con exactitud si participaron directamente en combates sobre las islas, sí se los usó para reforzar la defensa continental argentina, disuadir ataques británicos y relevar aeronaves propias desgastadas.
Esta historia, durante mucho tiempo desconocida, forma parte del entramado de cooperación regional que rodeó al conflicto. A continuación, algunos datos destacados:
- Tipo de avión: Mirage 5P (modelo de caza y ataque supersónico)
- Año del despliegue: 1982, en plena Guerra de Malvinas
- Base de partida: Chiclayo, Perú
La historia de estos aviones es una muestra de cómo, en momentos críticos, los vínculos entre países pueden tomar formas insospechadas. Y en este caso, la ciudad de Chiclayo, hoy más conocida por su herencia religiosa, quedó marcada para siempre por su silencioso aporte a una de las guerras más recordadas de Sudamérica.